No tires las cáscaras de naranja: así de fácil podés preparar este desengrasante natural e infalible para tu cocina

Las cáscaras de naranja, que a menudo descartamos, pueden convertirse en un poderoso aliado para la limpieza del hogar. Su alto contenido en aceites esenciales y ácido cítrico las hace ideales para elaborar un desengrasante natural y efectivo.

Para preparar este limpiador casero, necesitás reunir tres o cuatro cáscaras de naranja sin pulpa, un cuarto de taza de vinagre blanco, una taza de agua y dos cucharadas de bicarbonato de sodio. Si deseás potenciar su efecto, podés añadir un chorrito de alcohol etílico. Comenzá cortando las cáscaras en trozos pequeños y dejalas secar durante un día. Luego, colocá las cáscaras de naranja en un frasco junto con el vinagre, el agua y el bicarbonato. Dejá reposar la mezcla por al menos dos días para que los ingredientes se integren correctamente.

Una vez listo, transferí el líquido a un pulverizador y aplicalo sobre las superficies grasosas de la cocina. Dejá actuar unos minutos y luego limpiá con un paño húmedo. Este desengrasante, hecho con cáscaras de naranja no solo es eficaz, sino que también es una opción ecológica y económica para la limpieza del hogar.

El truco casero para dejar tus vidrios impecables y sin manchas

Por otro lado, mantener los vidrios relucientes puede ser una tarea sencilla con una solución casera y natural. Para ello, necesitás cáscaras de limón o naranja, y vinagre blanco.

Colocá las cáscaras en un frasco y añadí vinagre hasta cubrirlas. Tapá el frasco y dejalo reposar en un lugar oscuro durante dos semanas. Pasado este tiempo, colá la mezcla y transferila a un pulverizador, añadiendo medio vaso de agua. Agitá bien antes de usar y aplicá sobre los vidrios. Limpiá con un paño seco y notarás cómo quedan brillantes y sin marcas.

Este método aprovecha las propiedades desinfectantes y desengrasantes del vinagre y los cítricos, ofreciendo una alternativa natural y efectiva para la limpieza de tus ventanas y espejos.