Recetas
Los comprados están carísimos, cambiá la tradición esta Pascua con estos huevos salados de papa
Esta opción es más económica para compartir en familia durante estas Pascuas.Con la llegada de Pascua, una nueva propuesta culinaria está ganando terreno entre quienes buscan una opción original. El huevo de Pascua salado se presenta como una alternativa deliciosa y fácil de preparar en casa, ideal para sorprender con un plato diferente. A base de papa horneada y bien seca, esta receta combina texturas y sabores que reemplazan el clásico chocolate por una versión salada irresistible.

Para hacer tu propio huevo de Pascua salado, comenzá cocinando papas enteras con piel al horno hasta que estén tiernas. Luego, hacé un puré bien firme y condimentalo con sal, pimienta y un chorrito de aceite. En un molde con forma de huevo, alterná capas de puré, relleno de atún, choclo, arvejas, zanahoria, cebolla morada y tomate con mayonesa, además de una capa de palta y huevo duro. El truco está en aceitar suavemente el molde, forrarlo con film y volver a aceitar antes de montar el huevo. Después, dejalo en la heladera al menos dos horas para que tome firmeza.

Para terminar, podés decorarlo con una mayonesa de remolacha o con los ingredientes que más te gusten. Esta versión salada no solo es creativa y sabrosa, sino también una de esas recetas que invitan a reinventar las celebraciones tradicionales. El huevo de Pascua salado llegó para quedarse, y si todavía no lo probaste, este es el momento perfecto para animarte a preparar tu versión casera.

Mini canastitas de masa filo con vegetales para estas Pascuas
Por otro lado, si buscás sumar más opciones saladas a tu mesa de Pascua, estas canastitas de masa filo con vegetales son perfectas. Son livianas, elegantes y muy fáciles de preparar. Además, podés servirlas como entrada o como parte de un almuerzo pascual más informal.
Para hacerlas, necesitás masa filo cortada en cuadrados. Colocá de a tres capas en moldes de muffins, pincelando cada una con un poco de manteca derretida o aceite. En el centro, agregá un relleno de espinaca cocida, cebolla salteada, queso crema, un toque de nuez moscada y sal. También podés hacer versiones con zanahoria rallada, choclo y huevo duro picado. Llevá al horno por 15 minutos a 180 grados hasta que estén doradas y crujientes.
Estas canastitas no solo quedan lindas, sino que permiten jugar con sabores y colores, y podés prepararlas con anticipación.