REALEZA
Falleció de la peor manera y no pudo despedirlo: tristeza sin fin en la familia del rey Felipe
El año 2020 ha estado colmado de malas noticias.
La familia del rey Felipe se pasó de tanatorio en tanatorio el 2020 para el olvido: todo comenzó el 8 de enero con la tristísima partida de la infanta Pilar.
Aquella tarde en el funeral fue la última vez que el rey Felipe compartió una ceremonia con su familia: su padre Juan Carlos, su madre Sofía y sus hermanas Elena y Cristina.
Pero al menos el rey Felipe pudo despedir a su querida tía Pilar, amada hasta por la reina Letizia y cuyo adiós marcó el comienzo del declive de Juan Carlos.
Quien no tuvo la suerte de despedir a su amigo del alma y confidente más cercano fue el cuñado del rey Felipe: Iñaki Urdangarín, preso en la cárcel de Brieva.
Es que tras sufrir un derrame cerebral irreparable, fallecía una de las figuras más importantes en la carrera profesional de Iñaki Urdangarín: Juan de Dios Román.
Para dolor en España en general y al que la familia del rey Felipe no le ha sido ajeno, el técnico siempre fue uno de los grandes apoyos para el marido de la Infanta Cristina.
Incluso en sus peores momentos, el cuñado del rey Felipe ha sido testigo de la espalda que le han dado sus amigos y familiares. Muchos, menos Juan de Dios.
La partida que deja sin consuelo a Iñaki y pone fin a un año tristísimo para el cuñado del rey Felipe, un 2020 en el que le fue negada la prisión domiciliaria y las salidas habituales por el rebrote de la pandemia.
