¡Se destapa el escándalo! Rocío Carrasco toma una decisión que hundiría a Rocío Flores
Madre e hija estarían lejos de un acercamiento.
Hace ya muchos años que Rocío Flores y su madre Rocío Carrasco se han alejado para nunca más reencontrarse y muchas son las hipótesis que surgieron acerca de la causa de este distanciamiento.
Tras las confesiones y las lágrimas que Flores derramó en Supervivientes los últimos días, resulta evidente que tiene en mente retomar el vínculo con su madre Rocío Carrasco, y poder dejar en el pasado aquellas disputas que las han enfrentado.
Tanto es así, que la joven participante de Tierra de Nadie mencionó estar arrepentida y el dolor que le genera el distanciamiento sin que su madre exprese ningún tipo de reacción al respecto de esos sentimientos, dejando al descubierto el escándalo que se interpone en su relación y la negativa de Carrasco en acercarse nuevamente a su hija. ¿Pero por qué?
Hace ya siete años que Rocío Flores y Rocío Carrasco rompieron su relación tras una agresión de la hija hacia su madre, aunque ese no sería el motivo principal y pese a la angustia que expresa la joven, su progenitora no estaría dispuesta a ceder mientras que no baje la guardia con su esposo, Fidel Albiac.
Fuentes cercanas a la familia aseguran que Carrasco no le perdona a Flores la forma en la que se refiere constantemente contra su pareja y eso queda evidenciado en las últimas palabras de la joven hacia su padrastro, a quien señaló como el culpable de la mala relación entre ambas.
En la prueba a la que fue sometida en Supervivientes, la hija de Rocío Carrasco y Antonio David Flores evidenció todo el rencor que siente hacia Fidel Albiac, aunque sin llamarlo por su nombre y se refirió a él con despectivas frases. Hace ya muchos años que Rocío viene dedicándole mensajes agraviantes en las redes sociales a Albiac, cuando incluso le ha dicho allá por el 2012:
“Querido novio de mi madre, siento decirte que tocas de pu(...) cu(...) la guitarra. Te ruego que te dediques a otra cosa y que te calles ya, joder. ¡Uf!”.
Si bien por estos días Rocío Flores se niega a hablar de él, mientras este comportamiento hostil continúe su madre parece no estar interesada en tenderle una mano a pesar de los momentos de angustia que hoy la abordan en medio de la nada misma.
