A pesar de la indignación, MasterChef tomó una decisión rotunda

Como es de conocimiento público, con las medidas de seguridad pertinentes, MasterChef ha vuelto a grabar sus ediciones con los aspirantes de cocina hace más de un mes y, de momento, el programa se vio envuelto en una polémica.

¿El motivo? El el pasado lunes 15 de junio, los televidentes han podido ver la primera entrega de esta nueva temporada que presenta el reality show español, tras el confinamiento social por el coronavirus.

Ahora, si bien el ciclo televisivo demostró al día siguiente que se desplazó hasta Cáceres para la prueba de exteriores "al aire libre", las imágenes del debut han causado indignación en las redes sociales.

Esto último se debe a que la audiencia del programa-franquicia de competencia se mostró muy molesta por la enorme cantidad de personas que estaban viendo cómo grababan dicho plató, sin mantener la distancia social que se pide para evitar el contagio.

Cierto es que nada tiene que ver con la programación en sí, sin embargo, los cibernautas comenzaron a colgar un sinfín de instantáneas en las que se podía apreciar cómo la aglomeración innecesaria de gente se encontraba en la Plaza Mayor.

"En ningún momento ha habido voluntad por parte del ayuntamiento ni de la productora de publicitarlo ni se ha llamado a acudir a las inmediaciones", publicó El Periódico de Extremadura sobre el tema.

Por otro lado, el formato que ha tenido cuatro versiones diferentes en el mundo no se ha pronunciado al respecto y, por consiguiente, anunció hace unas horas en su página oficial de Instagram que abre un nuevo casting, esta vez, para los más pequeños de casa.

"Abierto el casting de MasterChef Junior 8. Entra en rtve.es/castingmcjunior y completa el formulario".