REALEZA
La confesión es demoledora: así se enteró el Rey Felipe
Horas sensibles en el entorno familiar del monarca.
El Rey Felipe creyó que con un comunicado histórico iba a dar por finalizado el vínculo con Corinna, la amante de su padre, el emérito Rey Juan Carlos. Pero no fue así: las palabras emitidas por Casa Real el 13 de marzo son apenas el prólogo de una historia que pone en vilo a la Familia Real.
Corinna Larsen ha regresado a la escena y lo ha hecho como nunca: rompió cualquier vínculo que quedaba pendiente con Juan Carlos y ahora va a la carga por el mismísimo Rey Felipe, acusándolo de haber permitido que una campaña de desprestigio que incluye, según su testimonio, amenazas gravísimas.
Desde que se hicieron públicas sus conversaciones con el comisario Villarejo, Corinna no ha dejado títere con cabeza en el círculo Borbón: las acusaciones a Juan Carlos de actos poco éticos en un jefe del Estado han dado paso a que la Fiscalía del Tribunal Supremo lo investigue.
Tiene tanta información Corinna que no quedan dudas de la relación sentimental de esta empresaria con el padre del Rey Felipe, un noviazgo que pudo acabar en matrimonio con Juan Carlos en plena crisis con Sofía.
Acorralado por las versiones, la confesión de Juan Carlos al por entonces futuro Rey Felipe sobre Corinna fue demoledora: el monarca se enteró del affaire en una cena en el restaurante "El Landó".
El Rey Juan Carlos reunió a sus tres hijos para contarles todo: Elena, Cristina y Felipe, quienes escuchaban azorados los planes del emérito con Corinna y que tenían que ver nada más y nada menos que con la posibilidad concreta de divorciarse de Sofía para casarse con la alemana.
No tocó bocado el Rey Felipe cuando su padre puso el ejemplo del Príncipe Carlos y Lady Di: ese dato de la separación legal también figuraba en las conversaciones de Corinna con el comisario Villarejo.
Los años de amor intenso, viajes institucionales junto a Juan Carlos y una agenda privada y secreta parecen haber quedado en el olvido. Tiembla Juan Carlos y sufre su hijo el Rey Felipe, en una situación tan delicada que no parece tener un pronto final.
