REALEZA
Estaba de parranda: el Rey Juan Carlos es incorregible
Ya todo forma parte del pasado.
El Rey Juan Carlos anda con el semblante caído a los 82 años y con una nube de juicios sobre su cabeza: eso no es novedad. Lo que sí llama la atención es que siguen saliendo secretos verdaderos de su pasado incorregible.
No son nuevos los escándalos que ponen en jaque a la Casa Real y la historia de la era de 39 años del Rey Juan Carlos no dejan de sucederse: su hijo Felipe se vio obligado a tomar distancia para limpiar el nombre de la institución.
Mientras Felipe realiza una gira sin precedentes, las fiestas fastuosas del Rey Juan Carlos demuestran que, como dice la canción: "No estaba muerto, estaba de parranda".
Si había una fiesta importante para la clase alta de la sociedad era el día de San Juan: el 23 de junio era la noche más esperada por el Rey Juan Carlos celebrando su onomástica a todo trapo.
Curiosamente, al Rey Juan Carlos no le gusta celebrar su cumpleaños, pero en la fecha de su santo se desquitaba, pero este año ha pasado el peor día. Eso sí: no siempre estuvo de capa caída.
El Rey Juan Carlos regalaba fiestas increíbles para más de 3000 personas en los jardines del Campo del Moro, justo enfrente del Palacio Real.
Artistas, políticos, periodistas, nobles, empresarios y notables figuras del jet set no se perdían las fiestas del Rey Juan Carlos, quien mantenía así una larga tradición de los Borbones.
Las críticas por los excesos en las fiestas del Rey Juan Carlos, cuya fortuna personal está calculada en 2 mil millones de euros, comenzaban a sonar con fuerza: la Familia Real era recibida con la Marcha Real sonando a cargo de la banda de música de la Guardia del Rey y con 21 salvas de ordenanza. Luego se armaba la fiesta y el baile y el derroche hasta altas horas. Cosas que ya no volverán.
