La gran contradicción de Alexia Rivas en su nueva vida con Alfonso Merlos y como influencer

Estamos cercanos a cumplir tres meses desde que se desató el culebrón de “Merlos Place”, el que tuvo principalmente como involucrados al propio Alfonso Merlos, Alexia Rivas y Marta López.

Recordemos que el periodista se encontraba haciendo una videollamada para “Estado de Alarma”, cuando Alexia apareció en el fondo de la imagen con escasa vestimenta. Así se descubrió la infidelidad de Alfonso a Marta, con quien estaba en pareja en ese momento.

Mientras Rivas y Merlos decidieron encerrarse en la casa de él y cumplir con el confinamiento obligatorio por el coronavirus, la ex "Gran Hermano" se convirtió en colaboradora de Telecinco. En las primeras semanas, lo hizo para ventilar asuntos personales, pero luego todo se apagó.

Asimismo, cuando Alexia decidió quedarse con su flamante pareja, también dejó de lado el trabajo que tenía como colaboradora de “Socialité”, argumentando que no quería ser un personaje público.

Es más, la joven llegó incluso a demandar a la productora “La fábrica de la tele” -la misma que maneja “Socialité”, “Sálvame”, “Salvame Deluxe” y “Viva la vida”, entre otros- por "acoso laboral" y "por humillarla en riguroso directo".

Desde ese momento, Rivas dejó de aparecer en los medios y empezó a inflar su imagen en las redes sociales, pasando de los poco más de 20.000 seguidores que tenía en Instagram a 117.000.

En el último mes y medio, la excolaboradora fue una máquina de subir historias en su red social y así, de no querer ser un personaje público, pasó a compartir toda su vida y los sponsors no tardaron en llegar.

Marcas de ropa, una clínica estética y gafas de sol son las empresas que eligieron a Alexia Rivas para comenzar a publicitar en su Instagram. En sus historias, podemos ver cómo mezcla la publicidad con sus situaciones de vida, como la romántica cena que tuvo con Alfonso Merlos en Ibiza, donde viajaron para descansar unos días.