“¡Odiaba vestirme!” La desconsoladora confesión de Drew Barrymore
Cuenta como fue la historia con su cuerpo.
La cuenta de Instagram de Drew Barrymore es un fiel reflejo de lo que ella pasó a lo largo de su vida. Allí expone sus proyectos artísticos, como así también los personales.
La red social en donde tiene más de 12 millones de seguidores es el registro fotográfico de los cambios que ha sufrido la famosa actriz a lo largo de los años. Fue allí donde hace algunos días sorprendió a sus seguidores con un reflexivo post sobre su transformación física.
Es que la protagonista de “Los Ángeles de Charlie” siempre tuvo una lucha por mantenerse en forma su cuerpo y en su descargó escribió: “Subo y bajo. La montaña rusa de mi cuerpo es un paseo desafiante, pero bonito. Tengo dos hijas. ¡Mi propósito más importante en este planeta es por ellas! Es un verdadero milagro que haya podido tenerlas. Así que, sean cuales sean las consecuencias de mi cuerpo, ¡adelante!”
Drew también contó que ha tenido muchos altibajos por las características de su anatomía y confesó: “Ha habido veces en las que me he parado en mi armario y he llorado. Odiaba vestirme”.
La también directora y productora agregó “que NO te dejes engañar cuando las personas se vean delgadas justo después de dar a luz. No te compares con las revistas y las alfombras rojas. Si me he visto bien desde que tuve a mis dos hijos, es porque he luchado para conseguirlo. ¡Tú también puedes!”.
Luego, la Embajadora contra el hambre en el “Programa Mundial de Alimentos” habló de lo difícil que es encontrar un balance y mantener un equilibrio saludable: “Puede quitarle a la vida mucha alegría por la comida. Pero ya no más. AHORA encontré esa esquiva B llamada BALANCE. ¡45! Sólo tardé 45 años en encontrarme a mí misma. Justo donde se supone que debo estar”.
La mujer de 45 años nacida en Estados Unidos nos inspiró a todos con sus mensajes, tanto es así que su publicación tiene más de 870 mil likes y más de 17 mil mensajes de agradecimiento y apoyo por compartir su dura experiencia.
