Irina Baeva reveló cómo se quedó con el amor de Gabriel Soto
La actriz convive con su pareja hace varios meses.
De acuerdo a los colegas de la pareja, fue Irina quien comenzó con la elección de un apodo poco común en todos los ensayos y encuentros. Para referirse a su compañero usaba el término 'krolik' que significa conejito en su idioma natal.
La expresión de cariño de la rusa continuó por el resto del 2016 y se fortaleció en 2017, cuando el actor aún mantenía la convivencia con sus hijas y el matrimonio con Geraldine Bazán no habría mostrado grietas.
Sin embargo, cuando los medios comenzaron a encender la polémica por los rumores de separación entre Bazán y el protagonista de "Soltero con hijas", el sobrenombre que usaba la blonda parece haber quedado oculto de las actividades públicas.
Un año después se confirmaría que la actriz habría logrado quedarse con el corazón del mexicano, no tan solo por sus tiernos cumplidos sino también por su habilidad para los platillos gourmet que forman parte de la cotidianeidad de la pareja.
Baeva dejó de ser un misterio desde que el ex marido de Geraldine comenzó a mostrar su amor en redes sociales, tiempo después se mudarían a la antigua casa de la familia, donde surgirían nuevas imágenes que la mostrarían como la nueva dueña del hogar.
Actualmente, la también modelo ha mantenido un perfil activo en sus redes, pero continúa con los comentarios desactivados, ya que prefiere cuidar su imagen que ha sido señalada con el título de "la nueva Panini". En su último Instagram Live reveló:
"No me da miedo que me critiquen, solo que prefiero las críticas constructivas que sirvan para mejorar y crecer, esas son totalmente válidas. Aprendí que la opinión que no venga desde el amor no cuenta, así de simple".
Finalmente la artista quiso refrescar su imagen mostrándose como una mujer común que a veces necesita cirugías y debe combatir las estrías y las arrugas en su piel. Sobre su visión en la vida confesó: "Todo pasa por algo, el universo fluye y conspira a tu favor".
