Multas de 2.500 euros o seis meses de cárcel para quienes organicen fiestas clandestinas en Irlanda

Irlanda entrará este jueves en confinamiento por primera vez desde el comienzo de la pandemia. Para asegurarse de que la población va a cumplir las nuevas normas, el Gobierno irlandés presentó un proyecto de ley que prevé costosos castigos.

Pese a que las autoridades del país europeo habían impulsado desde marzo medidas voluntarias, el gobierno de coalición observó que esto no funcionó. Por ello, el lunes se decretó la alerta máxima frente al coronavirus.

Dentro de las nuevas restricciones estará la prohibición de realizar fiestas. Por ello, si se infringe una vez esta norma, los organizadores (ocupantes de la casa) serán multados con hasta 1.000 euros o una pena de prisión de hasta tres meses.

De reincidir en una segunda fiesta clandestina, la multa ascenderá hasta 1.500 euros y la misma pena de cárcel o ambas. Una tercera infracción será castigada con una multa de 2.500 euros o hasta seis meses de prisión. 

Quienes eventualmente asistan a la fiesta y no quieran retirarse “de manera pacífica”, tendrán multas de hasta 1.000 euros o un mes de cárcel. Se espera que el Congreso le dé el visto bueno a la iniciativa del Gobierno de Irlanda.

Además, la ley incluirá también multas fijas de 500 euros para quienes se nieguen a usar tapabocas en el transporte público o en los comercios o quienes se muevan a más de 5 kilómetros de su domicilio, salvo para trabajar o estudiar. 

El Gobierno de Irlanda pidió también a los ciudadanos positivos de coronavirus es que rastreen ellos mismos a sus contactos cercanos, puesto que el sistema de rastreo está colapsado. 

Irlanda, un país de unos 4 millones de habitantes, contabiliza más de 53.000 casos postivos de coronavirus y 1.868 defunciones a causa de la enfermedad desde el inicio de la pandemia, según los datos de la Universidad Johns Hopkins.