Uruguay mantendrá cerradas sus fronteras durante el verano: cuáles serán las excepciones
Se teme una disparada de los casos en la temporada estival.
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, anunció anoche que las fronteras de su país continuarán cerradas en el verano a causa de la pandemia de coronavirus. El mandatario teme que, de abrirlas, los contagios aumenten.
El mandatario del vecino país aseveró que cuando en el resto del mundo se abrieron las fronteras y “se relajó el turismo”, los casos de coronavirus se dispararon. Puso como ejemplo el caso de Islandia. Por eso su decisión.
Será un verano restringido. Las fronteras van a estar, básicamente, cerradas.
Sin embargo, habrá excepciones. Se mantienen las incluidas en el decreto de marzo y, afirmó que quizás se agregue alguna más. Entre quienes pueden entrar a Uruguay según aquellas excepciones están los extranjeros residentes en el país.
Además, los extranjeros que “se beneficien de corredor humanitario o sanitario”; diplomáticos acreditados en Uruguay u organismos internacionales que tengan sede allí, y quienes necesiten protección internacional (debidamente fundada).
También si se trata de reunificaciones familiares; ingresos transitorios con fines empresariales, judiciales o laborales; quienes trabajen en transporte internacional, y los brasileños que vivan en la ciudad fronteriza.
Actualmente, el principal problema de Uruguay está en la ciudad de Rivera, no solo fronteriza con Brasil, sino que también es binacional, es decir prácticamente unida con la ciudad brasileña de Santana do Livramento.
Allí, se detectaron 15 casos relacionados a las escuelas, por lo que las autoridades del país oriental decidieron suspender las clases por dos semanas para frenar la propagación del virus.
