¿Un presidente peligroso? Bolsonaro besó y abrazó a sus seguidores en plena crisis por el coronavirus
El mandatario desafía el contagio del virus.
Mientras los diferentes gobiernos toman medidas estrictas para frenar el avance del coronavirus, como decretar la cuarentena obligatoria o el estado de sitio, suspender los vuelos y cerrar las fronteras, el presidente de Brasil hace todo lo contrario.
En contra de las medidas aconsejadas por la Organización Mundial de la Salud para evitar la propagación del SARS-CoV-2 de mantener distancia social, evitar el contacto directo y muy cercano entre las personas, Bolsonaro recorrió este domingo las calles de la capital del país para interactuar con los ciudadanos.
Su comportamiento desafía no solo al coronavirus sino también a su propio ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, quien recomendó a las personas a mantener la distancia social para evitar un colapso del sistema de salud por los contagios con COVID-19.
Tras su recorrido, y mientras hablaba con las personas, el mandatario defendió que solo los ancianos y los enfermos se recluyan por el coronavirus, a contrapelo de las medidas de restricción que tomaron los gobernadores.
Tras el paseo, el mandatario publicó en redes sociales videos de su paseo por las calles, interactuando y sacándose fotos con los vecinos de las localidades de Ceilândia y Taguatinga, ambas en el Distrito Federal.
Brasil confirmó este domingo 22 nuevas víctimas fatales por coronavirus, con lo que el número total de fallecidos se eleva a 114, mientras que los casos confirmados ya son 3.904, según la información proporcionada por el Ministerio de Salud.
Sao Paulo y Rio de Janeiro son los dos estados de Brasil más afectados por el coronavirus. Sus gobernadores pidieron a la gente mantenerse en cuarentena, decisión que les costó un enfrentamiento con el presidente de Brasil.
