Estados Unidos: Nuevo récord de casos diarios por coronavirus
Superó por cuarta vez los 60.000 contagios en 24 horas.
Estado Unidos contabilizó un nuevo récord de contagios diarios por coronavirus. En las últimas 24 horas se detectaron 63.247 nuevos casos. Los estados de Florida, California y Texas son donde más se ha acelerado propagación de la enfermedad en las últimas dos semanas.
Las cifras oficiales indican que la tasa de positividad -los casos positivos sobre la cantidad de pruebas realizadas- es actualmente en el país norteamericano del 28%. La proporción está lejos del 10% que la Organización Mundial de la Salud estima que debe ser.
A nivel nacional, en Estados Unidos ya hay más de 3,11 infectados con coronavirus y casi 134.000 personas han fallecido. En las últimas 24 horas, Texas, en el sur del país, contabilizó 9.765 nuevos casos y 95 fallecidos. Esto lleva a una acumulación de casos de más de 240.000 contagios y más de 3.000 defunciones.
Por su parte, California, en el oeste del país, registró 7.800 contagios y 140 decesos, con un acumulado, entonces de más de 300.000 y más de 6.000 respectivamente. Los hospitales del condado de Los Ángeles alcanzaron un nivel récord de internaciones, puesto que esa zona concentra alrededor del 40% de los casos del estado.
Mississippi, Illinois, Carolina del Sur, Luisiana, entre otros estados, registraron también incrementos de casos e internaciones, a niveles récord en algunos casos. La mayoría de los gobernantes de dichos estados, no obstante, continúan sin imponer el uso obligatorio de tapabocas y medidas de distanciamiento social.
Las estimaciones iniciales más optimistas de Washington sobre el balance de defunciones por coronavirus ya fue ampliamente superada, con los más de 133.000 fallecidos hasta el momento. Dichas estimaciones estaban entre los 100.000 y 240.000 decesos. Ahora, esos cálculos se actualizaron y se espera que unas 185.000 fallecerán para octubre.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visitó ayer el estado de Florida. Allí, el condado de Miami-Dade ha sido tan afectado por el avance del coronavirus que el número de internaciones creció un 74%. Si sólo se tiene en cuenta las camas de terapia intensiva, creció un 88% y el uso de respiradores automáticos creció un 123%.
A pesar de estas cifras, Ron DeSantis, gobernador de Florida y fuerte aliado del mandatario republicano, se rehúsa a frenar la reapertura económica. Además, presentó su apoyo al pedido de Trump de que en septiembre comiencen las clases con normalidad, a pesar de las recomendaciones contrarias de epidemiólogos y docentes.
