Atroz invasión a tierras indígenas durante el primer año del gobierno de Bolsonaro, según informe
El documento fue redactado por el Consejo Indigenista Misionero.Las denuncias de atropellos contra los pueblos indígenas en Brasil crecieron en un 150% durante el primer año del presidente Jair Bolsonaro: de 110 en 2018, pasaron a 276 en 2019. Así lo reportó el Consejo Indigenista Misionero (CIMI).
Esta organización, vinculada a la iglesia católica del país sudmericano, detalla en su informe los numerosos casos de amenazas de homicidio, racismo, discriminación, violencia y abuso de poder, entre otros.
Lo que más recalcó el CIMI, no obstante, es la creciente usurpación de tierras indígenas. Las denuncias de invasiones sobre estos territorios y la explotación ilegal de recursos fueron 109 en 2018, pero pasaron a 259 en 2019.
Hoy el mayor agresor de los pueblos indígenas y de la naturaleza es el propio gobierno brasileño.
Así lo aseguró el arzobispo y presidente del CIMI, Roque Paloschi. Según el informe, muchos de los invasores se sintieron avalados por Jair Bolsonaro cuando llegó a la presidencia de Brasil.
Los propios invasores mencionaban el nombre del presidente de la República.
El mandatario ultraderechista del gigante sudamericano no solo se opone firmemente a demarcar nuevas tierras indígenas, sino que también responsabilizó a estos pueblos por los incendios en la Amazonía y en el Pantanal.
Aún así, recientemente Bolsonaro defendió su política medioambiental contra las crecientes críticas internacionales, al afirmar que Brasil -y su administración- son víctimas de una “brutal campaña de de desinformación”.