Estados Unidos ofreció pagar a familiares de las víctimas de un ataque errado en Afganistán

El bombardeo de Estados Unidos con un dron ocurrió dos días antes de su retirada del territorio afgano.
sábado, 16 de octubre de 2021 · 10:17

El Gobierno de Estados Unidos informó que había ofrecido una compensación económica a los familiares de las víctimas de su ataque equivocado del pasado 29 de agosto en Afganistán. Aquel día, diez personas fueron asesinadas, siete de las cuales eran niños.

El comunicado del Pentágono (Departamento de Defensa de Estados Unidos) detalla que Colin Kahl, el subsecretario de Defensa para la Política, se reunió virtualmente con Steven Kwon, presidente de Nutrition and Education Internacional, un grupo de ayuda para el que trabajaba Ezmarai Ahmadi, el hombre que erróneamente fue el blanco del ataque del país norteamericano.

Las autoridades indicaron que, en la conversación, Kahl reiteró que lo ocurrido había sido “un trágico error”, que Ahmadi no tenía culpa de nada y que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, reiteraba su compromiso para las familias de las víctimas.

Además del pago, cuyo monto no fue revelado, el mensajero estadounidense indicó que se apoyaría a los familiares de Ahmadi para que puedan trasladarse a Estados Unidos si así lo desearan.

En un primer momento, los estadounidenses habían dicho haber atacado a un objetivo terrorista.

Unos días después del error garrafal cometido por las fuerzas del país norteamericano, el medio ruso RT entrevistó a familiares de las víctimas. "Si nos dan toda la fortuna del mundo entero, esto no será suficiente. Es imposible. No se puede compensar el asesinato de un niño. Esta pérdida no tiene remedio", declaró Emal Akhmadi, padre de una niña de dos años que murió en el bombardeo.

Akhmadi afirmó que ellos querían una investigación oficial y que los responsables sean condenados por la Justicia estadounidense. “Solo entonces aceptaríamos el monto de la reparación de acuerdo con la ley de Estados Unidos”, sentenció.

 

El ataque fallido

El 29 de agosto, tres días después de que el ala regional del Estado Islámico (llamada ISIS-K) realizara un mortal atentado suicida al aeropuerto de Kabul y que dejó decenas de muertos, la inteligencia estadounidense siguió a un Toyota blanco durante ocho horas.

Se sospechaba que el vehículo estaba involucrado con la planificación de otro ataque puesto que había sido visto en un punto donde se creía que el ISIS-K había preparado el atentado. Así que, horas más tarde, le lanzaron un misil. No solo Ahmadi fue asesinado, sino también otras nueve personas, siete de las cuales eran niños.