Estados Unidos
Alarma en Nueva York por el aumento inédito de casos de una rara enfermedad transmitida por ratas
Las autoridades de Nueva York intentan controlar la plaga que atesta la ciudad.Las autoridades de Nueva York, Estados Unidos, alertaron sobre un número nunca antes visto de casos de leptospirosis en un solo año. Esta es una rara enfermedad que se transmite por la orina de las ratas.
En lo que va del 2021, se detectaron 15 personas que contrajeron esta enfermedad bacteriana en Nueva York. De ese total, 13 terminaron hospitalizadas, la mayoría por "insuficiencia renal y hepática agudas", mientras que dos sufrieron una "grave afectación pulmonar". Además, una persona murió en la Gran Manzana a causa de esta dolencia.
Solo uno de los enfermos contrajo el virus en viaje, por lo que el problema es definitivamente local. Los pacientes proceden de cuatro de los cinco distritos de Nueva York: solamente Staten Island quedó excluida, al menos hasta el momento.
Los números son llamativos si se los compara con los años anteriores. Basta decir que desde el 2006 al 2020, se registraron 57 casos en total. Todavía se desconoce qué fue lo que causó el notorio crecimiento, pero las autoridades sanitarias creen que los cambios en el clima y un aumento de las temperaturas podrían haber contribuido a que la bacteria se propague con más facilidad.
Más aún, aunque ninguno de estos casos estuvo directamente relacionado con las inundaciones que dejó el huracán Ida en Nueva York, sí es cierto que estas condiciones climáticas facilitan la transmisión de la enfermedad. Es que la orina de las ratas puede contaminar el agua acumulada y llegar a las personas cuando estén obligadas a caminar sobre calles inundadas o sumergirse.
Una plaga incontrolable
Los habitantes de Nueva York están acostumbrados a la presencia de ratas grises. No es de extrañar: se estima que 2 millones de animales de esa especie viven en la Gran Manzana. Sin embargo, hubo un aumento en el último tiempo.
En lo que va de 2021, hubo 20 mil quejas por plagas, cifra que representa un aumento del 20% respecto del año pasado. Por ello, las autoridades de la mayor ciudad de Estados Unidos redoblaron los esfuerzos en las inspecciones para ubicar las zonas donde hay mayor presencia de los animales y poder controlar su población.