Dentro de 30 años, 9 de cada 10 adultos en este país de América Latina tendrá sobrepeso u obesidad
La obesidad trae consecuencias no solo físicas, sino también mentales y emocionales.Expertos del Gobierno de México advirtieron que para el año 2050, el 88 % de los ciudadanos tendrán sobrepeso o padecerán obesidad. Es decir, casi 9 de cada 10 personas.
"Actualmente, en México, 7 de cada 10 personas tienen sobrepeso u obesidad y se estima que la tendencia seguirá en aumento, pues para 2050 el 88 % de la población mexicana tendrá alguna de estas dos condiciones", afirmó la endocrinóloga Emma Chávez Manzanera, quien también es coordinadora de la Clínica de Obesidad y Trastornos de la Conducta Alimentaria del país azteca y se especializa en el abordaje de esta enfermedad.

En otras palabras, más de 62 millones de adultos (de los 126 millones de personas que residen en México) viven con sobrepeso u obesidad. A estos se suman los 12 millones de niños, niñas y adolescentes que los padecen. Con estas cifras, el país dirigido por el presidente Andrés Manuel López Obrador se ubica entre los primeros países del mundo donde viven personas con estas condiciones.
Chávez Manzanera hizo hincapié en que la obesidad trae aparejados diversos problemas de salud. "Las personas que viven con obesidad desarrollan problemas metabólicos, cardiovasculares y osteomusculares, entre otros", detalló. Además, esta enfermedad crónica multifactorial hace disminuir la esperanza de vida, subrayó.

Enfoque múltiple
La experta mexicana aseveró que, como su origen tiene muchos factores, la obesidad debe ser tratada de manera integral. Para ello, se recomendó cuidar la alimentación desde la infancia y generar cambios a nivel social y cultural, tanto en lo relacionado a la comida como al ejercicio.

En esto estuvo de acuerdo Héctor Esquivias, psiquiatra y jefe del Departamento de Educación Continua del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz.
Para Esquivias, "es importante, además de tratamiento farmacológico, tratar factores emocionales y de conducta para mantener cambios de conducta saludable". Según explicó, los pacientes deben ser acompañados para que puedan modificar sus pensamientos y comportamientos, puesto que, dijo, muchas veces padecen antojos “intensos” que derivan de una conducta compulsiva.