Bielorrusia
Crisis en la frontera: la Unión Europea amplía las sanciones contra Bielorrusia
La situación migratoria entre Bielorrusia y Polonia empeoró en las últimas semanas.Los ministros de Relaciones Exteriores de los países miembros de la UE (Unión Europea) decidieron ampliar las sanciones a Bielorrusia por la crisis migratoria en la frontera con Polonia, puesto que es uno de los límites exteriores del bloque comunitario. Bruselas considera que los miles de personas que se concentran sobre la frontera son un “ataque híbrido” por parte de Minsk.
A partir de la nueva resolución adoptada por los diferentes cancilleres, representados en el Consejo de Asuntos Exteriores, la UE será capaz de sancionar “a individuos y entidades que organizan o contribuyen a actividades del régimen de (el presidente Aleksandr) Lukashenko que facilitan el cruce ilegal de las fronteras exteriores de la UE” desde Bielorrusia. Aunque el Gobierno de este país de Europa del Este niegue las acusaciones, desde Bruselas están convencidos.
"La decisión de hoy refleja la determinación de la Unión Europea de hacer frente a la instrumentalización de los migrantes con fines políticos. Estamos rechazando esta práctica inhumana e ilegal", subrayó el documento de la UE. Más temprano, Josep Borrell, el jefe de la diplomacia europea, había justificado estas nuevas medidas contra Bielorrusia.
"Las sanciones siempre son efectivas porque afectan a la gente, su riqueza y su capacidad de movimiento”, aseguró y detalló que estas medidas se extenderán a las "aerolíneas, agencias de viajes y todo el mundo involucrado en el tráfico ilegal de migrantes". Los nuevos nombres que caerán en la lista negra no se verán, no obstante, hasta que terminen los trabajos de investigación.
La respuesta de Minsk
Las acusaciones de que la crisis en la frontera entre Bielorrusia y Polonia fue provocada por Minsk como venganza por las sanciones impuestas por la UE desde el año pasado fueron siempre negadas por el Gobierno. Hoy, sin ir más lejos, Lukashenko aseguró que se “trabaja” para que los migrantes retornen a sus países de origen.
"Se está trabajando activamente en esta zona para convencer a la gente: por favor, vuelvan a casa. Pero nadie quiere volver", afirmó el mandatario bielorruso. "Quisiera subrayarlo, no queremos ningún conflicto en nuestra frontera. Sería completamente perjudicial para nosotros", agregó.
En este sentido, señaló a Polonia como la responsable de la situación puesto que, según Lukashenko, Varsovia tiene la necesidad de tener una crisis como esta a causa de sus “problemas internos” y de la tensa relación que mantiene actualmente con el resto de los socios de la UE.
Frente a la amenaza de sanciones que se vislumbraba desde ayer por las acusaciones de orquestar esta crisis migratoria, Lukashenko insistió en que su gobierno reaccionará si llegan a implementarse. “Si quieren asustarnos con sanciones, piensan que bromeo, pero nada de eso, vamos a defendernos”, sentenció.