La cuarta ola de la pandemia tapa a Europa y ahoga a Bulgaria: nuevo récord de muertes

El Ministerio de Salud de Bulgaria informó hoy que registraron 334 muertes a causa del coronavirus en las últimas 24 horas. Se trata de la cifra más alta desde el inicio de la pandemia, en momentos en que una cuarta ola de contagios golpea con fuerza a Europa.

Asimismo, en la última jornada se confirmaron 5.286 casos positivos en Bulgaria y 1.411 enfermos de coronavirus tuvieron que ser hospitalizados, con lo que la suma de internados se eleva a 8.516. De este total, 723 está en terapia intensiva, un número realmente preocupante, puesto que este país del sur de Europa cuenta con entre 750 y 800 camas de cuidados intensivos.

Además, el hecho de conseguir una cama en terapia intensiva en Bulgaria no asegura la supervivencia: los expertos estiman que el 90 % de los enfermos de coronavirus, que llegan a esta instancia, no sobreviven. No obstante, el mayor problema en el país más pobre de la Unión Europea es la falta de vacunación.

Bulgaria es actualmente el país menos inmunizado de los 27 países del bloque: solamente el 26,9 % de los 6,9 millones de personas que viven en el país balcánico completó su esquema de vacunación. Esta cifra es abrumadoramente menor que la media del bloque comunitario europeo, que se ubica casi en el 76 %.

La situación en Europa

Lo que sucede en Bulgaria es sintomático de lo que acontece en gran parte de Europa, que volvió a ser el epicentro de la pandemia. Esto se ve, sobre todo en el centro y en el este del continente (dentro como fuera de la Unión Europea), donde se observa una correlación entre la falta de vacunación y la disparada de los contagios.

En Rumania, por ejemplo, donde menos de un tercio de la población se vacunó, el promedio de muertes se mantiene en las 300 diarias, pese a que las infecciones cayeron a la mitad en los últimos días. Los hospitales continúan al límite y muchos ciudadanos tuvieron que ser trasladados a otros países para ser atendidos.

La situación es similar en Serbia, Croacia, Eslovenia, República Checa, Eslovaquia y Hungría. Por eso, muchos gobiernos volvieron a imponer restricciones para intentar frenar la propagación, como la ampliación de los pases sanitarios, algo que provocó protestas por parte de la población.