Moderna empieza a probar su vacuna contra el coronavirus en niños pequeños

Infantes de 6 meses a 12 años participarán en esta etapa de ensayos.
viernes, 19 de marzo de 2021 · 19:00

A medida de que el mundo va avanzando con las inmunizaciones contra el coronavirus y las poblaciones más vulnerables del planeta empiezan a tener acceso a los sueros inoculantes, surgen cientos de preguntas relacionadas a las vacunas y sobre la influencia de las mismas en los niños. Pero este tema será una incógnita solo hasta esta semana, porque la empresa líder en el mercado de los medicamentos en Estados Unidos, Moderna, ha anunciado el inicio de una ronda de ensayos experimentales de su candidata perfilada, justamente, a fortalecer el sistema inmune de los más pequeños de la casa.

En un comunicado oficial, la fabricante estadounidense con sede en Massachusetts detalló que, desde este mes, se ha empezado a trabajar en un prototipo de vacuna contra el virus para ampliar el rango etario de los pacientes inoculados, es decir, para que abarque también a los niños menores de 18 años; el rango mínimo de edad permitida para vacunarse en la mayoría de los países. 

Moderna ha explicado que desde el inicio de las pruebas médicas se ha empezado a trabajar en un grupo de infantes voluntarios en edades promedio de seis meses hasta los 12 años y que los grupos forman parte de Estados Unidos y Canadá; en total la cantidad de niños que participarán en el experimento serán 6.750, para ser exactos y todos cuentan con el permiso de sus padres y representantes, citando a la compañía

En este contexto, Moderna ha destacado que en este nuevo protocolo clínico se está trabajando con especialistas y científicos colaboradores del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas del país norteamericano, los mismo que se encargaron de garantizar que el fármaco para los mayores fuera eficaz y no presentara efectos secundarios severos. 

Además, se dio a conocer que para los niños de este ensayo, el tiempo de espera entre vacuna y vacuna será de 28 días, cuatro semanas, una más que con los pacientes más grandes, precisamente, para cotejar y garantizar que cada uno de los niños participantes en el proyecto no presente síntomas adversos o secuelas post inoculación. 

La compañía estadounidense ha destacado que esta sería la fase media de los ensayos clínicos en niños y que solo faltaría la etapa final, la de las vacunaciones a gran escala para poder garantizar que serán los pioneros en el mercado en fabricar un antídoto solo para niños. A la par, se está trabajando desde el mes de diciembre con otro grupo de infantes de un rango etario más grande, de 12 a 18 años, donde participan unos 3.000 voluntarios menores de edad y con los cuales se está probando otro prototipo médico.