Encontró una foto, la guardó por años y gracias al Twitter ubicó a su dueña y la devolvió

Una pariente de los retratados reconoció a su familia y se contactó con la internauta.
viernes, 5 de marzo de 2021 · 08:55

Desde el auge de las redes sociales en la década del 2000, muchas han sido las plataformas interactivas con las que el mundo se ha familiarizado y habituado a tal punto de que, en la actualidad, forman parte de la rutina diaria del común denominador de las personas. Con el paso de los años, estas herramientas han ido sumando fuerza, credibilidad y confianza; y el poder que han ganado es inconmensurable. Instrumentos como Twitter son capaces de mover masas, influir en alegrías, tristezas o incluso en histerias colectivas. Algunas veces han hecho temblar a los Gobiernos, pero cuando la solidaridad impera en estos medios su capacidad de alcance logra cosas maravillosas, como financiar campañas altruistas y reunir familias. 

Este es el caso de Victoria Johnson, una neoyorquina que hace unos 15 años compró un libro usado y, para su sorpresa, dentro de este había una fotografía bastante particular y que, seguramente, había pasado por lo menos unas cuatro décadas allí. En el retrato se observaban cuatro personas de un aparente núcleo familiar: un papá, sus dos hijas y una madre. Según Victoria, la imagen le generó tanta curiosidad que decidió conservarla durante todo este tiempo, pero justo este mes decidió regresar esta reliquia familiar a sus verdaderos dueños. Por ello, tomó otra fotografía del retrato y lo posteó en Twitter esperando que alguien la contactara con información.

No pasaron más de dos días hasta queJohnson recibió un mensaje directo en la bandeja de la red social. Se trataba de una mujer que aseguraba ser la sobrina del hombre en la foto. “Estoy segura de que es mi familia junto a mi tío Sheldon”, le escribió la internauta. Así, la neoyorquina logró contactarse con una de las mujeres de la foto, nada más y nada menos que con la menor de todo el cuadro, quien ahora tiene 65 años de edad y vive en el extremo sur del país, en Texas, en la ciudad de Richardson.

Después de un par de días, Victoria Johnson tomó la fotografía familiar que había encontrado, la depositó dentro de una sobre y la envió al correo con destino a Texas. Esta misma semana, después de haber recorrido más de 2.840 kilómetros de distancia, la reliquia familiar al fin volvió a las manos de su dueña, Valerie Sudduth, la hija menor del cuadro. Casi entre lágrimas y con una mezcla de alegría nostálgica, Sudduth tomó el retrato que por años estuvo lejos y bromeó sobre su peinado, refiriéndose a lo feliz que había sido ese día cuando se tomó la foto. Finalmente, después de agradecerle a la neoyorquina por haber conservado la imagen por tanto tiempo, Sudduth reflexionó sobre el poder de las redes sociales y el bien tan grande que le hacen a la humanidad cuando son utilizadas para generar alegrías y por el bien común.