Un nuevo incendio envuelve a un campo de refugiados en Bangladesh

En menos de 15 días, un segundo incendio ha vuelto a sacudir al campo de refugiados de la minoría étnica birmana rohingya en la localidad sureña de Cox's Bazar, en Bangladesh. En la madrugada de este viernes, las voraces llamas arrasaron con un mercado de comida donde los pobladores del asentamiento tenían sus tiendas improvisadas.

El Departamento de Bomberos de Bangladesh ha notificado la defunción de unos tres rohingyas que trabajaban y vivían en una de las tiendas del mercado, donde se presume que inició el siniestro. Otras dos personas lograron sobrevivir al incendio sin presentar heridas de ningún tipo, informó a la prensa la Agencia de Protección Civil. Además, se detalló que unos 20 locales comerciales quedaron completamente calcinados y que las pérdidas materiales para los comerciantes serán altas. 

Por otra parte, las autoridades bangladesíes han detallado que aún se desconocen las causas de este nuevo incendio fatal, aunque se maneja como primera hipótesis que, posiblemente, se tratase de un corto circuito que comprometió a las instalaciones eléctricas, provocando chispas que alcanzaron cualquier material inflamable de las tiendas. De acuerdo con la policía regional del país asiático se emprenderán nuevas averiguaciones. 

Reconstrucción del campo de refugiados

Este nuevo incendio, el cuarto en lo que va del año y el segundo en menos de dos semanas, se presenta en medio de los trabajos de reconstrucción del campo de refugiados rohingya que el pasado 22 de marzo se vio envuelto en otro colosal siniestro que acabó con la vida de 15 personas, dejó a 45.000 sin hogar y más de 500 heridos.

Con la ayuda y el financiamiento del Gobierno de Bangladesh, las Naciones Unidas (ONU) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) los grupos de construcción han iniciado las labores de limpieza y reedificación de las cientos de viviendas afectadas en el incendio, además de la reconstrucción de las oficinas de las agencias no gubernamentales. 

Se estima que más de 1 millón de rohingyas viven actualmente en Bangladesh desde el año 2017, cuando el Gobierno bengalí los recibió y los protegió del mayor exterminio étnico registrado en Myanmar.