Biden cumple la promesa migratoria: EE. UU. recibirá más solicitudes de refugio
Naciones Unidas aplaude la decisión del Gobierno norteamericano.
“Estados Unidos es y seguirá siendo una nación que apoya, acoge y ayuda a los refugiados del mundo”: con estas palabras, el jefe de Estado norteamericano, Joe Biden, ha oficializado el aumento de la cuota anual de solicitudes de asilo y refugio para los extranjeros que ven al país como un destino seguro para vivir.
Ahora, el Gobierno de Estados Unidos, en vez de recibir 15.000 peticiones de asilo este año (como fue pautado por la antigua Administración liderada por Donald Trump), acordó que el nuevo tope será de 62.500 postulaciones, lo que indica un aumento de 47.500 nuevas solicitudes, tres veces más que el mínimo histórico anunciado por Trump.
“Estamos cumpliendo otra promesa electoral al revertir esta penosa cifra de solicitudes establecida por los Gobiernos anteriores”, aseveró el mandatario norteamericano, al mismo tiempo se comprometió con los refugiados del mundo a aumentar este objetivo en los próximos años y que para el próximo año fiscal (2022/2023), el país de América del Norte estará recibiendo unas 125.000 solicitudes anuales.
Nuestro país es un faro para las libertades y una cuna para las nuevas oportunidades; los valores de Estados Unidos son defender y proteger a los más vulnerables del mundo, por eso debemos acoger a las personas que de verdad quieren venir a trabajar y aportale a la nación.
La ONU da la bienvenida a la decisión de Biden
El anuncio de Biden ha sido aplaudido por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), quien publicó en su cuenta de Twitter un mensaje felicitando al Gobierno de Estados Unidos por la decisión de acoger a los solicitantes de asilo, reconociendo que esta postura inspira a todos los países a recibir a cientos de miles de personas de todo el mundo que huyen del hambre y de los conflictos armados.
Según Acnur y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), hasta finales del 2020, la cifra de refugiados y desplazados a nivel mundial supera las 79,5 millones de personas, la cifra más alta registrada en la historia moderna.
