Derek Chauvin, el asesino de George Floyd, solicita al juez un nuevo juicio
Los abogados alegan irregularidades en el proceso y un trato injusto con el acusado.
Semanas después de ser declarado culpable por el homicidio de George Floyd, el expolicía de Minnesota Derek Chauvin y su equipo de abogados defensores solicitaron ante un juez del condado una moción para que se realice un nuevo juicio por el caso, argumentando que el acusado no recibió un trato justo.
Según la defensa de Chauvin, liderada por Eric Nelson, durante las semanas que duró el juicio contra el expolicía de 45 años, se transgredieron varios factores legales que impidieron el debido proceso y un dictamen justo para su defendido, afirmando que tanto el jurado como los fiscales (la defensa de Floyd) tuvieron una mala conducta durante las comparecencias.
La moción de Chauvin consta de cuatro folios y tendrían diversas “irregularidades” que se presentaron durante las cuatro semanas de comparecencias, como por ejemplo: la publicidad que recibió el caso de George Floyd antes, durante y después del veredicto, algo perjudicial para el jurado y modificó la estructura del debido proceso.
Otro de los alegatos de la defensa fue “la supuesta presión mediática y social que recibieron todos los involucrados durante el juicio, condición que pudo haber coaccionado la sentencia del caso para el afroamericano”. Aunado a esto, los abogados de Chauvin aseguraron que las fuertes connotaciones raciales que imperaron en el juicio también transgredieron las leyes e impidieron que el acusado recibiera un veredicto más justo.
El juicio contra Derek Chauvin
Hace dos semanas, un jurado de 12 civiles (compuesto por 6 personas blancas y 6 de otras etnias) votó de forma unánime a favor de la culpabilidad del expolicía de Minneapolis, acusado de tres cargos: homicidio en primero y segundo grado y homicidio agravado en primer grado, por el asesinato de George Floyd, en mayo del 2020.
Acto seguido, el juez del distrito reiteró la decisión y declaró culpable a Chauvin, un veredicto que marcó la historia de Estados Unidos en un antes y un después, dado que es muy poco común que la justicia falle con tal firmeza contra un oficial de policía y teniendo en cuenta los antecedentes raciales del país de América del Norte.
