Brasil exige la salida inmediata de Jair Bolsonaro ante el escándalo de las vacunas

Justicia brasileña acepta investigar al presidente por su presunta corrupción.
sábado, 3 de julio de 2021 · 19:46

Un grito al unísono inunda las calles de Brasil: “Fuera Bolsonaro”. Con esta premisa, cientos de miles de brasileños volvieron a tomar las calles del país sudamericano, este sábado, para exigir la renuncia del presidente Jair Bolsonaro, investigado por un presunto delito de corrupción relacionado a la compra de vacunas contra el coronavirus.

Decenas de ciudades, a lo largo y ancho de la nación latinoamericana, se sumaron activamente a esta nueva jornada de descontento social contra el mandatario brasileño, justo en el mismo fin de semana en el que Brasil superó las 520.000 muertes relacionadas con el virus

Esta sería la segunda jornada masiva de “indignación contra Bolsonaro” en menos de un mes y la quinta en lo que va del año. Recordemos que Brasil ha pasado gran parte de este 2021 entre bloqueos y cuarentenas regionales, debido a la una fuerte escalada del coronavirus que se desató en la región a principios de año.

Los brasileños responsabilizan a Bolsonaro de “gestionar mal” la pandemia de esta enfermedad viral y culpabilizan  a su gobierno del medio millón de decesos y las más de 18,6 millones de infecciones registradas en el país desde marzo del 2020, cuando la infección se propagó por el territorio. 

 

Investigación en curso contra Bolsonaro

En el marco de estas multitudinaria movilización en Brasil, la Cámara Baja de Senado ha decidido aceptar la petición de un grupo de legisladores para que se investigue a fondo al presidente de la nación y a las autoridades del Ministerio de Salud, involucrados en una entramada de corrupción por una presunta “compra ficticia de vacunas” al laboratorio indio Bharat Biotech, fabricante de la candidata Covaxin. 

Al parecer, los encargados de la sanidad brasileña “emitieron facturas falsas y a sobre costo” por unos supuestos lotes de vacunas contra el coronavirus que nunca llegaron al país, mientras que Jair Bolsonaro, al tanto del delito, decidió no denunciar y volverse cómplice de este deplorable hecho. Cabe acotar que tanto el dirigente como los responsables de la Salud niegan su participación en el hecho.