Estados Unidos anunció nuevas sanciones contra Cuba: Joe Biden anticipó que puede haber más

Estados Unidos impuso nuevas sanciones contra Cuba como reacción a la represión a las históricas protestas del 11 de julio contra el Gobierno de Miguel Díaz Canel. Particularmente las medidas están centradas contra dos dirigentes de la Policía Nacional Revolucionaria de la isla.

Desde el Departamento del Tesoro del país norteamericano señalaron que en principio las sanciones serán simbólicas y afectarán a la institución policial como también a su director, Óscar Callejas Valcarce y su subdirector, Eddie Sierra.

Andrea Gacki, directora de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro aseguró que la oficina “seguirá señalando y mencionando por su nombre a los que faciliten el involucramiento del régimen cubano en violaciones graves a los derechos humanos”.

En el mismo sentido, indicó que estas sanciones simbólicas apuntan a que los funcionarios del Gobierno cubano rindan cuentas por ser “responsables de suprimir las peticiones del pueblo cubano”.

Estas nuevas medidas se suman a otras decretadas durante la semana pasada, cuando el Ministerio de Defensa de Cuba recibió sanciones de parte de Estados Unidos, que acusó a esa cartera de no respetar los derechos humanos de los manifestantes.

Fuente: (Telesur)

Biden amenazó con profundizar las sanciones

Luego de una reunión en la Casa Blanca con líderes cubano-estadounidenses, Joe Biden lanzó una contundente advertencia sobre la posibilidad de ampliar las sanciones contra el Gobierno de la isla. “Habrá más a menos algún cambio drástico en Cuba”, alertó en una conferencia de prensa.

El encuentro con la comunidad cubana residente en Estados Unidos se realizó con el propósito de analizar una serie de medidas adicionales a partir de las exigencias que levantaron los manifestantes en las calles de La Habana.

Entre las acciones que evalúa la Administración de Biden se destaca la posibilidad de proporcionar acceso a internet a los habitantes de Cuba. Además, se creó un grupo de trabajo especializado que revisará la política estadounidense respecto de las remesas. Esto, para asegurar que el dinero que se envía desde el exterior llegue directamente a las manos de sus destinatarios sin pagar impuestos adicionales al Gobierno.