Puerto Rico y varias islas del Caribe bajo amenaza por una potencial tormenta tropical
El Centro Nacional de Huracanes de EE. UU. emitió un estado de alerta.
Un potencial sistema meteorológico amenaza a las costas del Caribe: Puerto Rico, República Dominicana, las Islas Vírgenes de Estados Unidos y gran parte de las Bahamas se encuentran bajo estado de alerta por una monumental tormenta tropical que avanza rápidamente por el océano Atlántico.
Este temporal tropical, aún sin nombre, podría convertirse eventualmente en el sexto ciclón en azotar las costas caribeñas en lo que va de la temporada de huracanes, con una mayor intensidad en la isla boricua, donde aún se sienten los estragos del huracán María, que devastó casi por completo la costa norte de Puerto Rico.
Los vientos sostenidos de este ciclón tropical ya rozan los 80 kilómetros por hora, advirtió esta mañana el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, quien emitió alerta de inundaciones y fuertes lluvias para un puñado de islas caribeñas. Se prevé que este temporal toque tierra en Puerto Rico entre el miércoles y el jueves.
En su paso por el mar Caribe ya ha provocado leves inundaciones en las islas de Guadalupe y Dominica, donde las precipitaciones y las grandes marejadas aún persisten, aunque no se han confirmado víctimas ni daños materiales. Por su parte, las autoridades meteorológicas han extendido el estado de vigilancia para las Islas Turcas y Caicos, el sureste de las Bahamas y el norte de Haití.
Puerto Rico y su mala racha con los desastres naturales
A casi un mes de que se cumplan los primeros cuatro años del paso del huracán María por las costas de Puerto Rico, esta isla Latinoamérica ubicada al norte del mar Caribe no ha logrado recuperarse por completo de los estragos provocados por este poderoso temporal que acabó con la vida de más de 3.000 puertorriqueños y dejó graves daños en la infraestructura.
El huracán María fue catalogado como el peor desastre natural en la historia de la isla borinqueña, además de ser uno de los ciclones más mortíferos en formarse en el océano Atlántico. En el 2017, dejó al 95% de la población de Puerto Rico sin energía eléctrica ni agua potable por más de un año y devastó más de medio millón de viviendas.
Sin embargo, en la actualidad, todavía un 20% de la población no cuenta con suministro eléctrico constante y más de 30.000 personas aún se encuentran damnificadas.
