Para Merkel, hay que dialogar con los talibanes para poder salvar vidas

Alemania y otros países europeos trabajan para evacuar a sus funcionarios y a sus colaboradores de Afganistán.
viernes, 20 de agosto de 2021 · 13:44

La canciller de Alemania, Angela Merkel, reconoció que los países occidentales tendrán que conversar con los talibanes, quienes nuevamente están al frente de Afganistán. El objetivo: sacar a la mayor cantidad de las personas que colaboraron con Berlín durante los últimos 20 años y así salvar sus vidas.

“Ahora habrá que dialogar con los talibanes e intentar salvar a aquellos cuya vida está amenazada para que puedan abandonar el país", afirmó la gobernante alemana. Merkel se reunió hoy con su par ruso, Vladimir Putin, en Moscú, en lo que fue su último viaje como canciller al país eslavo.

Pese a que admitió estar “molesta” por el ascenso de los talibanes al poder, Merkel afirmó que ahora la prioridad de su país es brindar seguridad a los afganos y las afganas que trabajaron con Berlín al sacar "a cuantas más personas se pueda en los próximos días".

La desesperación por abandonar Afganistán se intensificó después de que se conociera que los talibanes buscan a excolaboradores de gobiernos y organizaciones extranjeras.

 

Para Putin, esto es una lección

El mandatario ruso indicó que lo importante ahora es evitar la desintegración de Afganistán. "El movimiento talibán controla a día de hoy prácticamente todo el territorio del país, incluida la capital. Esta es la realidad. Precisamente, debemos partir de ella sin permitir, sin lugar a dudas, la desintegración del Estado afgano", aseveró en su conferencia de prensa conjunta con la canciller alemana.

Pero, además, en su intervención en Moscú, el líder del Kremlin lanzó una feroz crítica a Occidente. “Todos nuestros socios deben convertir esta regla en universal: tratar con respeto a sus socios y armarse de paciencia si algo les gusta o no. Darle a los pueblos el derecho a decidir por ellos mismos su destino, independientemente de cuánto tiempo les lleve recorrer la senda de la democratización", disparó.

Así y todo Putin dijo no querer regodearse del fracaso Occidental en Afganistán puesto que a Rusia le conviene que haya estabilidad en Asia central.

Asimismo, puso a su propio país como ejemplo de lo que no hay que hacer al recordar la experiencia soviética cuando Moscú también invadió Afganistán en 1979. En este sentido, afirmó que es contraproducente intentar imponer un sistema político ajeno, puesto que puede resultar en la desintegración de un país.