Un espectáculo de luces: así fue la ceremonia de despedida de los Juegos Olímpicos Tokio 2020
París se prepara para ser sede del evento próximo, programado para 2024.
Tras 17 días intensos en Japón, finalizaron los Juegos Olímpicos Tokio 2020 con un impactante espectáculo de luces, además de música, danza y otras performances. De esta manera, quedó realizada la transición del evento, por lo que París ya sería la próxima sede del encuentro deportivo.
La ceremonia comenzó con un pequeño resumen de las competencias internacionales que se llevaron a cabo en esta oportunidad y el desfile de todos los atletas que participaron de esta edición de los Juegos Olímpicos.
Luego de un pequeño acto ceremonial, en el que estuvieron todas las banderas de los países participantes, el estadio olímpico apagó completamente sus luces, lo que sorprendió a todos los presentes. De repente, una nube de lámparas led cubrió a los deportistas hasta formar los emblemáticos aros de los Juegos Olímpicos.
Una vez finalizado este espectáculo, la calma volvió al predio y se procedió a entregar las medallas de los ganadores de las maratones y también se llevó a cabo la tradicional ceremonia del izado de las banderas olímpicas.
Así, el emblema de los Juegos Olímpicos fue entregado a la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, por lo que la transición se volvió oficial y la capital francesa se convirtió en la próxima sede del evento deportivo.
Las luces y el color volvieron a tomar el poder del estadio y miles de bailarines comenzaron a danzar en el predio de Tokio, para continuar con los festejos por la finalización de los Juegos Olímpicos más complejos de la historia.
Los Paralímpicos y París 2024
A pesar de que los Juegos Olímpicos Tokio 2020 llegaron a su fin, los Paralímpicos comenzarán este martes, 24 de agosto, y durarán hasta el 5 de septiembre en la misma sede del evento deportivo.
Además, París ya se prepara para recibir a los Juegos Olímpicos, por lo que cientos de personas se reunieron en el Campo de Marte para vivir en simultáneo la transición con Tokio, puesto que la llama olímpica dejó de arder en Japón.
