Un anciano de 72 años sobrevivió tres días en una selva de Tailandia sin agua ni comida

El hombre de nacionalidad británica se perdió en el bosque el pasado miércoles.
sábado, 4 de septiembre de 2021 · 22:35

Un pensionado británico de avanzada edad logró sobrevivir a una tremenda odisea luego de perderse en las profundidades de una jungla selvática de Tailandia, hogar de innumerables especies salvajes y serpientes altamente venenosas.

Leonard Barry Weller, de 72 años de edad, originario del Reino Unido, quedó atrapado durante tres días, sin agua ni comida, en un denso bosque de la provincia de Khon Kaen, en el noreste del país asiático, cuando salió de paseo en su motocicleta para visitar a unos amigos cerca de esta región.

El hombre relató que hizo una breve parada en una carretera boscosa para estirar las piernas y caminar un poco, después de pasar varias horas sentado en la moto. Como era bastante temprano, decidió adentrarse un poco al bosque y subir una colina empinada para hacer un poco de ejercicio matutino. 

Vive en Tailandia hace 15 años, y nunca se había perdido en la selva. 

Al cabo de una hora, Weller decidió retomar su camino y volvió por la ruta que él creía que había tomado, pero al parecer se equivocó de dirección y terminó adentrándose aún más en las profundidades de la selva de Tailandia, una zona donde habitan elefantes salvajes, tigres, leopardos y osos del sol de Malasia.

Al percatarse de que ya habían pasado un par de horas y que solo caminaba a la deriva, el hombre, ya sediento y hambriento por la tremenda odisea, tomó la decisión de subir una pendiente bastante alta para treparse a la cima de un árbol, desde donde podría divisar con mayor claridad la ruta que debía tomar para regresar a su moto.

Según narró, utilizó su cinturón y lo último que le quedaba de energía para escalar el árbol, pero cuando al fin alcanzó la parte más alta, no pudo ver más que un mar de árboles al horizonte. 

Los servicios de emergencia de Tailandia lo rescataron a las 74 horas de haber ingresado al bosque.

Abatido y casi a punto de desfallecer, Weller se apresuró a descender del árbol y buscar un refugio, dado que se avecinaba una intensa tormenta. “Llovió durante horas”, relató, pero se sintió agradecido de la lluvia, porque al fin pudo beber un poco de agua fresca

Utilicé una hoja de árbol, la envolví en forma de sorbete y tomé agua de los charcos, las pendientes rocosas y los pequeños pozos que se formaron sobre la maleza.

Al caer la noche, muy exhausto y con el estómago que le crujía del hambre, el anciano se las ingenió para hacer una cama improvisada y poder descansar de aquél día tan agotador. “Tomé un montón de hojas, muchas grandes y pequeñas, y las ordené para hacer una especie de cama. Sabía que era peligroso dormir en el suelo, pero no tenía fuerzas ni energía para volver a trepar un árbol; así que me tiré al piso y dormí”. 

Su esposa y él tienen cuatro años de casados, pero conviven desde hace 12. 

Pasó la noche a la intemperie, solo con la vestimenta que lo cubría, ya que no portaba ni un suéter para cobijarse. Al día siguiente, justo al amanecer, se levantó y decidió volver a caminar entre la selva en busca de ayuda. De acuerdo a lo que contó, existen muchas comunidades originarias que viven adentradas en el bosque.

Sin embargo, pasó otro día entero y no logró conseguir ayuda ni comida. Weller reveló que “fueron las 72 horas más intensas, agotadoras y angustiantes de toda su vida”. Además, detalló que se enfrentó a intensas temperaturas y al extremo clima del trópico, donde en el día el termómetro suele alcanzar hasta los 36 grados centígrados y en la noche cae hasta los diez u once grados.

De verdad pensé que moriría en la selva, pero lograron ubicarme y me rescataron. Fue el día más feliz de mi vida. 

Le tomaron los signos vitales y le aplicaron suero para hidratarlo. 

 

36 horas de búsqueda incansable

Mientras el señor Leonard Barry Weller luchaba por su vida en las inmensidades de la selva de Tailandia, su esposa Tawee de Weller, de 49 años de edad, de nacionalidad tailandesa, emprendió un trabajo de búsqueda sin descanso.

Reveló que dio aviso a las autoridades desde el mismo día que su querido cónyuge no regresó a casa, debido a que era la primera vez que no regresaba a cenar. “Siempre sale de paseo con sus amigos, hacen largos viajes en moto y exploran el país, pero nunca pasan la noche fuera de casa, mucho menos sin avisar”.

La mujer notificó a la policía, a los servicios de bomberos y a las autoridades del Parque Nacional Khon Kaen para que iniciaran un rastreo en la zona, operación que duró más de 36 horas. Además, dieron aviso a las comunidades rurales por si encontraban al hombre, y en efecto, fueron los aldeanos los que consiguieron encontrar tres días después al señor Weller

Afortunadamente, el señor Weller no sufre ninguna enfermedad por su edad. 

Según contó a la prensa su esposa, un grupo de personas lo ubicó en medio del bosque, tirado en la cama improvisada de hojas, sin zapatos y con la camisa abierta. Así que llamaron a la policía y a los bomberos para que fueran a buscarlo.

Rápidamente, un grupo de paramédicos y socorristas llegó al lugar para auxiliarlo e hidratarlo, porque se encontraba en estado de shock y muy débil tras varios días sin comer. Por su parte, la reacción de su esposa al verlo salir de la selva con vida fue de alegría. La mujer corrió a los brazos del hombre, quien entre lágrimas y risas le agradeció por haberlo buscado.

Los bomberos locales los trasladaron en una ambulancia hasta el hospital más cercano, donde deberá pasar los próximos días bajo observación, en vista de su gran descompensación y las múltiples heridas e incisiones que tiene en sus brazos y piernas. Aunque los médicos aseguraron que se pondrá mucho mejor

Medios locales y británicos siguieron de cerca la búsqueda del desaparecido. 

 

Cuántas personas se pierden en los bosques de Tailandia 

Afortunadamente, la historia de Leonard y Tawee Weller terminó con un final feliz, con el hombre sano, salvo y a poco de regresar a su casa. Sin embargo, no todas las personas que se pierden en los bosque de Tailandia corren con la misma suerte de este anciano británico, muchos nunca aparecen, o en el peor de los casos, aparecen sin vida. 

Anualmente, las autoridades de Tailandia atienden entre 1.000 y 1.200 casos de personas extraviadas en los bosques del país, la mayoría consiguen ser rescatadas con vida.