Reino Unido

Hallaron un enorme fósil de “dragón marino” en el Reino Unido: “Pensaron que les tomaba el pelo”

Nunca se había encontrado un ejemplar de semejante tamaño en el Reino Unido.
lunes, 10 de enero de 2022 · 22:30

Un paisajista encontró de casualidad los restos de un “dragón marino” cerca de un lago en la Reserva Natural de Rutland, a unos 120 kilómetros de Londres, en el Reino Unido. El hallazgo ya fue catalogado como un gran hito de la paleontología británica.

Todo comenzó cuando Joe Davis trabajaba en este lugar del Reino Unido en febrero de 2021, cuando vio que entre el barro asomaba algo extraño. “Miré hacia abajo a lo que parecían piedras en el barro y pensé que parecía algo orgánico, un poco diferente”, contó a la prensa del país europeo.

Ubicación de Rutland, a 50 kilómetros de la costa británica.

Luego vi algo que parecía una mandíbula.

 

Inmediatamente, Davis llamó a la intendencia de este condado en el centro-sur del Reino Unido para decirles que creía haber encontrado los restos fósiles de un dinosaurio.

Paleontólogos trabajan en el lugar del hallazgo.

 

Comienzan los trabajos

Como Rutland no tenía un departamento de paleontología, mandaron a llamar a expertos. Los científicos concluyeron que no se trataba de un dinosaurio, sino de un ictiosaurio de diez metros de largo, también conocido como “dragón marino”.

Muchos pensaron que les estaba tomando el pelo cuando les conté que encontré un enorme reptil marino en el trabajo”, declaró Davis, quien afirmó que cree que recién le creerán cuando mañana salga el reportaje en la cadena BBC del país insular.

Ilustración de un ictiosaurio.

Ese depredador marino prehistórico de sangre caliente, que respiraba aire (no muy diferente a los delfines actuales) y que llegaba a medir hasta 25 metros de largo habitó el planeta hace unos 200 millones de años y se extinguió hace 90 millones de años.

El ejemplar hallado en Rutland es el de mayor tamaño jamás encontrado en el Reino Unido. Por eso, Dean Lomax, paleontólogo de la Universidad de Manchester, afirmó que era “uno de los grandes descubrimientos en la historia de la paleontología británica".