Estados Unidos

A un año del masivo asalto al Capitolio de Estados Unidos, cómo marchan las investigaciones

La toma del Capitolio es investigada por el FBI, la Justicia y el Congreso.
jueves, 6 de enero de 2022 · 03:30

Hace un año, una horda de simpatizantes del entonces presidente estadounidense, Donald Trump, irrumpió violentamente en el Capitolio. Hoy, hay causas contra 700 personas, pero el asunto está lejos de resolverse.

La investigación de lo que sucedió el 6 de enero de 2020 en el Capitolio se dividió en dos partes. Una de ellas la lleva adelante el Congreso y la otra, el FBI (Buró Federal de Investigaciones) y el Poder Judicial.

El objetivo era detener la sesión en la que se proclamaría a Joe Biden como presidente electo.

 

La investigación policial

El Poder Judicial se encarga de la parte policial y judicial de las pesquisas e investiga a las personas anónimas que protagonizaron los hechos violentos en el Capitolio aquel día.

Hasta ahora, se presentaron cargos contra 700 personas de todo el país, no solo de aquellos que viven en Washington, sino también de lugares tan remotos como Alaska o Hawái.

Los congresistas y senadores tuvieron que huir del Capitolio.

Los delitos por los que se procesaron a estos ciudadanos estadounidenses varían: desde entrar a un edificio con acceso restringido hasta destruir propiedad del Gobierno o atacar físicamente a policías. Este último podría conllevar las sentencias más duras.

Al día de hoy, la mayor condena que se dictó fue contra un hombre que atacó a policías con un matafuego. Por este hecho fue sentenciado a cinco años y tres meses de cárcel.

Una de las caras más visibles del ataque al Capitolio, el llamado “chamán de QAnon”.

Jacob Chansley (el “chamán de QAnon”) se declaró culpable de haber obstruido un procedimiento oficial durante una sesión del Parlamento, delito por el que fue condenado a 41 meses de prisión el pasado noviembre.

 

La investigación política

Mientras tanto, un comité del Congreso investiga a las personas que podrían haber sido las responsables políticas de incitar esta rebelión en la sede del Poder Legislativo estadounidense.

Los demócratas en el Congreso ya intentaron llevar adelante un juicio político contra Trump por el asalto al Capitolio.

El Parlamento, sin embargo, no tiene la potestad de sancionar a nadie, por lo que su trabajo es puramente informativo. Aún así, esto no impide que el círculo cercano al expresidente Trump haya salido indemne.

Lo que sucede es que, si alguna de las personas que son llamadas a dar testimonio no asisten al Capitolio, pueden ser declaradas en desacato y el Departamento de Justicia puede presentar cargos.

Momento en el que Steve Bannon se entregó a las autoridades.

Esto sucedió con el exasesor de Trump, Steve Bannon; su exjefe de Gabinete, Mark Meadows; y Jeffrey Clark (exayudante del fiscal general). De ser encontrados culpables, todos podrían enfrentar varios meses o algunos años de prisión.

Sin embargo, es más difícil que llamen a declarar al exmandatario, puesto que lo más probable es que se niegue a asistir y declararlo en desacato podría acrecentar sus denuncias de que es víctima de una “caza de brujas”.