Escocia
La Corte Suprema británica frena el referéndum por la independencia de Escocia
La primera ministra de la nación del norte afirmó que no "silenciarán" la voz del pueblo.Tras varios meses de idas y vueltas, la Corte Suprema del Reino Unido frenó el nuevo referéndum para la independencia de Escocia, promovido por su primera ministra Nicola Sturgeon. Esto generó un importante descontento en la política local que ve la medida de Londres como una manera para intervenir en la democracia del país británico.
En un comunicado realizado por la mandataria de Escocia, se expresó enojada por la decisión de los jueces británicos y afirmó que la democracia del país norteño “no va a ser denegada. El fallo de hoy bloquea una ruta para que nuestra voz sea escuchada, pero en una democracia no se puede silenciar a todos”, sentenció Sturgeon. En ese marco, agregó que someterá a elección la situación de la independencia “mediante el voto popular”, lo que lo transformaría en un referéndum de facto.
Los últimos cuatro primeros ministros habían rechazado el pedido de Sturgeon para realizar una encuesta de este tipo. Finalmente, Dorothy Bain, que ostenta el cargo de abogada de su Majestad y sirve como fiscal en jefe de Escocia, hizo un pedido para la ejecución de la medida al afirmar que formaba parte de las capacidades del parlamento del país británico. Pues, era solamente consultivo y no tenía ninguna consecuencia inmediata, y que igual que el Brexit, la independencia solo se conseguiría mediante largas negociaciones.
La decisión de la corte
A pesar de esto, el Lord Robert Reed, el presidente de la Corte Suprema, rechazó los argumentos escoceses luego de sostener que si fueran solamente para saber la posición del electorado, “hay que pensar en las consecuencias prácticas, no solo en las legales”. En caso de que finalmente el referéndum resultara a favor de la independencia, este poseería "la autoridad de una expresión democrática del pueblo escoses y a la larga podría fortalecer o debilitar la legitimidad de la unión”, sentenció el juez.
Es por eso que los cinco miembros concluyeron de manera unánime que “es claro que este proyecto tiene más que una suelta relación a un tema que atañe a la unión británica", como razón para rechazar la petición del gobierno escoses.