Chile

El fin de una lengua en Chile: cómo era el idioma yagán que murió con su última hablante nativa

La familia de Cristina Calderón comunicó su fallecimiento esta semana.
jueves, 17 de febrero de 2022 · 20:00

La familia de Cristina Calderón, la última hablante nativa del yagán, anunció que la anciana de 93 años falleció en el sur de Chile. Con ella, la lengua más austral del mundo acaba de morir.

Calderón, que también era conocida como “abuela Cristina” había sido reconocida por el Consejo de Cultura y las Artes de Chile como un “tesoro humano vivo”, porque era la guardiana de la cultura de su pueblo, que se fue perdiendo durante los últimos 100 años, a medida que el Estado del país trasandino avanzó sobre la región de Magallanes.

Cristina Calderón junto a parte de su familia.

Lidia González Calderón, la hija de la “abuela Cristina” y miembro de la Convención Constituyente del país vecino, contó que su madre había aprendido español a los 9 años. Tuvo 9 hijos, pero ninguno de ellos aprendió su lengua por miedo a que los discriminaran, algo común en Chile.

Con la muerte de su hermana Úrsula en 2003, Calderón ya no tuvo con quien hablar su lengua, pero dedicó todo su esfuerzo para que no quedara en el olvido. Por ello, con ayuda de una de sus nietas hizo el único diccionario del yagán al español que existe, además de un libro con leyendas nativas.

Cristina Calderón sostiene su libro.

“Madre, para los yagán, tu partida genera un vacío irremplazable desde lo cultural, humano y afectivo. Y nos plantea la tarea de preservar tu memoria y con ella la de nuestro pueblo”, escribió González Calderón en Twitter y continuó: “Ese es el trabajo que se me encomendó y con el que cumpliré por ti y nuestro pueblo”.

 

El idioma yagán

El pueblo yagán vivía en los archipiélagos del extremo sur de Chile y de América. Poblaban islas de la costa de Tierra del Fuego y también territorios entre el canal de Beagle y el Cabo de Hornos. Tan aislados estaban que su lengua también se desarrolló de la misma manera, es decir, no hay ningún idioma que sea “pariente” del yagán.

Ubicación de Villa Ukika, donde vivía actualmente Calderón y donde se concentraron los yagán desde la década de 1960.

Esto dificulta mucho la tarea de encontrar el origen de las palabras, así como también su gramática o sus estructuras. Sí se sabe, por ejemplo, que su vocabulario estaba altamente relacionado a la naturaleza de esta región y que era un idioma “altamente aglutinante”.

Esto quiere decir que se empleaban varias palabras para hacer una sola. Esto, que también caracteriza al quechua, el japonés o el finlandés, hace que una sola palabra pueda tener significados elaborados. No obstante, la colonización y el mestizaje hicieron que el idioma se fuera diluyendo y que solo quedara en la boca de Cristina Calderón.