Australia
Australia está cerca de eliminar el VIH: cómo lo logró
Naciones Unidas puso al país oceánico como ejemplo mundial en la lucha contra la epidemia.Australia detectó 633 nuevos casos de VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) en 2021. Se trata del número más bajo registrado desde 1984 y confirma la caída de la epidemia en el país.
Según explicó Eamonn Murphy, el director ejecutivo adjunto del programa Onusida de Naciones Unidas, Australia es ejemplo para el mundo, puesto que el Estado oceánico es uno de los pocos del globo que cumple la regla de “los tres 90”.
“90% de personas diagnosticadas, 90% de ellos en tratamiento y el 90% tiene una carga viral indetectable, lo que significa que no pueden transmitir sexualmente el virus", detalló. Como es de esperar, el éxito de Australia en la lucha contra el VIH no fue cosa de magia, sino que requirió un gran trabajo.
Cómo se logró
En primer lugar, desde el principio, el Gobierno de Australia dio protagonismo a las comunidades que eran más afectadas por el nuevo virus, es decir, los hombres homosexuales, las trabajadoras sexuales y los consumidores de estupefacientes inyectables.
Estas comunidades fueron parte de la respuesta a la epidemia que se dio en el país oceánico en todas sus etapas. Para mejor, estaban muy organizadas, especialmente la comunidad gay.
Entonces, cuando llegó el momento de actuar hubo una red de una enorme cantidad de voluntarios dispuestos no solo a ayudar a las personas gravemente enfermas, sino a dar un paso más para la prevención, aunque aún se desconocía enteramente cómo se transmitía.
Así se crearon recursos educativos, se abrieron centros de ayuda telefónica y se impulsó el programa de intercambio de agujas (los adictos llevaban sus agujas usadas y se les daban nuevas), todo apoyado por el Estado pero de manera indirecta.
Además, Australia fue uno de los primeros países en implementar la distribución del tratamiento contra el VIH a gran escala y de manera gratuita.
Gracias a estas iniciativas, Australia evitó una epidemia entre los adictos. Las tasas de infecciones por esta vía fueron entre cinco y diez veces más bajas que en algunas partes de Estados Unidos y que en algunos países europeos.
Además de la comunidad afectada, esto fue posible por el enfoque bipartidista de la lucha contra la epidemia y, por eso, Australia es ejemplo para el mundo.