Brasil

Los desastres en Brasil no paran: “Si las ciudades no están preparadas, vamos a llorar más muertos”

Los fallecidos durante las últimas inundaciones y deslizamientos se acercan al centenar.
martes, 31 de mayo de 2022 · 11:38

Las autoridades de Brasil actualizaron las cifras de las víctimas de las inundaciones y aludes en el área metropolitana de Recife (Pernambuco) este fin de semana: 93 muertos y al menos 26 desaparecidos.

El Ejército del país vecino, el Cuerpo de Bomberos, la Policía Federal, la Defensa Civil, organismos de socorro voluntarios y locales y federales trabajan desde el sábado, cuando la situación empeoró. Las escenas de desolación se repitieron una vez más en Brasil, esta vez, en el noreste del territorio, pero en lo que va del año las víctimas de estos fenómenos se cuentan de a cientos.

Fuente: (Noticias Telemundo)

 

Va a seguir pasando

Ayer, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro recordó que hubo problemas semejantes este año en Petrópolis, Río de Janeiro, cuyas inundaciones se llevaron la vida de más de 230 personas. En el sur de Bahía, en el norte de Minas Gerais y en Acre también se vieron desastres de este tipo en el último año.

Infelizmente, esas catástrofes suceden en nuestra parte del continente.

Unos bomberos continúan con las tareas de rescate en Pernambuco.

No obstante, hay cosas que se pueden hacer para que las consecuencias del cambio climático en el país no sean tan devastadoras, de acuerdo al coordinador de investigación del Centro Nacional de Monitoreo y Alertas de Desastres Naturales de Brasil, José Marengo.

Entrevistado por la agencia AFP, Marengo explicó: “El cambio climático podría ser responsable por el aumento de lluvias extremas, violentas, que están siendo detectadas no solo en Brasil, sino en todo el mundo”.

Un hombre saca sus pertenencias de su hogar devastado por los aludes.

Sin embargo, matizó: “Pero no puede ser culpado de que gobiernos permitan construir en áreas de riesgo o de que la población pobre no tenga adónde ir y deba construir y vivir en áreas vulnerables. Eso es un problema de urbanización”.

En Recife, como sucedió en Petrópolis, cayó una gran cantidad de agua en zonas de morros, que están atravesadas por ríos. Las lluvias desbordaron los cursos de agua y desmoronaron los cerros que se transforman en ríos de barro que arrasan con todo a su paso, especialmente, las viviendas de las comunidades más pobres que construyen sus casas sobre las laderas.

A la izquierda, un alud en Petrópolis en febrero; a la derecha, uno en Recife.

La lluvia no mata; es la combinación con personas viviendo en áreas de riesgo.

Frente a esta situación en el gigante sudamericano, Marengo llama a las autoridades a actuar. “Deberían prohibirse construcciones en áreas como morros y, si hay personas allí, llevarlas a zonas más seguras todos los años, no solo cuando hay desastres”, indicó y advirtió: “Si la población y las ciudades no están preparadas, vamos a llorar más muertos”.