El presidente de Ecuador afronta pedido de destitución tras casi dos semanas de protestas

El Congreso de Ecuador comenzará a debatir hoy el pedido de destitución del presidente Guillermo Lasso en medio de las masivas protestas en el país a las que el Gobierno respondió con una dura represión. Hasta ahora, murieron 5 personas y se registraron al menos 200 heridos.

La solicitud de destitución presidencial fue presentada por un sector de la oposición de Ecuador vinculada al correísmo (la línea política afín al exmandatario del país andino Rafael Correa). El pedido fue introducido bajo la causal de “grave crisis política y conmoción interna provocada por el incumplimiento de las promesas de campaña y un gobierno alejado de las necesidades y la realidad que vive la ciudadanía”.

Tras la sesión, a la que el presidente de Ecuador está convocado para que pueda hacer un alegato de defensa, el Congreso tendrá 72 horas para decidir el futuro de Guillermo Lasso al frente del país andino. La Asamblea necesita 92 de los 137 escaños para destituirlo, es decir, las dos terceras partes. No obstante, todo indica que no se contaría con los votos necesarios.

Sin embargo, si prosperara la destitución, el actual vicepresidente ecuatoriano, Alfredo Borrero, asumiría la Presidencia, mientras que el Consejo Nacional Electoral tendría que llamar a elecciones legislativas y presidenciales anticipadas.

Fuente: (TVP)

12 días de protestas

Ayer se volvió a vivir una nueva jornada de protestas encabezada por la Conaie (Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador) para reclamar al Gobierno que se cumpla con las diez demandas que pidieron desde el comienzo y que están relacionadas con las políticas económicas de la Administración de Lasso.

La Conaie, encabezada por su líder Leónidas Iza, pide que se bajen y congelen los precios de los combustibles, que se regulen los precios de los alimentos de primera necesidad, que se condonen o renegocien las deudas de millones de familias en medio de la crisis económica, que no se privaticen las empresas del Estado y que no se amplíe la frontera petrolera/minera en la Amazonía, entre otros.

Fuente: (AFP)

La dura respuesta del Gobierno ante las marchas en las que se reclamaban todos estos puntos hizo que las manifestaciones se volvieran más virulentas. Hasta el momento, se contabilizaron cinco fallecidos y múltiples heridos. Más aún, el Gobierno advirtió que podría reprimir con más fuerza al usar perdigones contra los manifestantes.

Mientras tanto, Guillermo Lasso denuncia que las protestas se tratan de un intento de sacarlo del poder, aunque esto fue desmentido por Iza. Por otro lado, pese a que el oficialismo accedió a atender algunas de las demandas, todavía no hay diálogo a la vista entre el Gobierno y la Conaie, y la crisis social sigue.