Talibanes

Los talibanes 2.0 estrenan nuevas formas de violencia machista, según una activista afgana

Las mujeres en Afganistán no desisten en su reclamo por su derecho a trabajar y estudiar.
viernes, 3 de junio de 2022 · 22:30

Los talibanes, al frente de Afganistán desde que tomaron el poder en agosto de 2021, volvieron a implantar muchas restricciones contra las mujeres, que ya estuvieron vigentes en su anterior régimen (1996-2001). No obstante, la activista afgana Nadia Ghulam asegura que la violencia machista tiene una vuelta de tuerca más.

Por ejemplo, durante el primer período del régimen de este movimiento islamista radical, eran los mismos talibanes los que pegaban a las mujeres si no iban tapadas de acuerdo a su reglamento. “Pero ahora castigan a tu marido y hermanos si no lo haces, por lo que generan la violencia en cada casa hacia las mujeres", explicó Ghulam, que vive en España desde hace 16 años.

Una protesta de mujeres en Kabul, en septiembre del año pasado; las mujeres son las que más resisten.

Ghulam se hizo pasar por hombre durante diez años para poder trabajar y alimentar a su familia durante el anterior mandato de los talibanes, puesto que las mujeres no podían ganarse su sustento. Es en este aspecto que la activista y escritora hace énfasis en la entrevista con Efe.

"La comunidad internacional se ha olvidado de Afganistán”, sentenció. “Los medios solo hablan de ello para decir que han vuelto a poner los burkas. Pero la noticia debería ir más allá, se debería hablar de la hambruna y de que no tienen acceso a la educación", continuó.

Una protesta de mujeres en Kabul contra la obligatoriedad del velo que cubre de pies a cabeza, esta semana.

"Ahora, las mujeres se han quedado sin estudiar ni ir a trabajar, la vida de las afganas ha cambiado a peor y la violencia contra las mujeres ha aumentado un 100 %.

 

Qué pasa en el terreno

La actualidad para las mujeres en Afganistán, como dijo Ghulam, no es nada alentadora. No solamente porque a las adolescentes se les impidió asistir a la escuela secundaria y porque el régimen talibán impuso la obligatoriedad de cubrirse de pies a cabeza, sino porque están sumidas en una extrema pobreza, como el resto del país.

Fuente: (RTVE).

Después de que los talibanes tomaron el control, el empobrecido país dejó de recibir ayuda internacional, cuyos fondos representaban gran parte de su PIB. A esto se les suman las dificultades que tienen las mujeres para trabajar. Esta semana, un grupo volvió a salir a las calles de Kabul, la capital afgana, para reclamar por sus derechos. En una de las pancartas se leía: "Todo está prohibido para nosotras excepto la pobreza".