Mosquitos

Insólito: dos mosquitos ayudaron a resolver el caso de un robo en China

Las pruebas de ADN son esenciales para resolver el 10% de los delitos en el país.
sábado, 16 de julio de 2022 · 11:19

Dos mosquitos, unos rastros de sangre y un examen de ADN. Esas fueron las pruebas que necesitó la Policía de China para atrapar al responsable de un robo. A pesar de lo inusual del caso, no es la primera vez que se utilizan este tipo de método para resolver crímenes en el país asiático.

A mediados de junio, un ladrón entró por el balcón a un departamento dentro de un condominio en la provincia de Fujian, en el sureste de China. Después de entrar, se cocinó unos huevos y unos fideos, prendió unos espirales para ahuyentar a los mosquitos, usó una manta y pasó la noche en el dormitorio del dueño. Al día siguiente se fue por donde entró y se llevó con él varios artículos de valor, pero dos insectos develaron su identidad.

Ubicación de la ciudad de Fuzhou, donde ocurrió el crimen.

Cuando la Policía fue a inspeccionar el lugar al día siguiente, encontró que había dos mosquitos muertos y pequeñas manchas de sangre sobre una pared. Como los dueños del lugar habían pintado las paredes hacía poco, los investigadores concluyeron que la sangre correspondería al ladrón. Según su lógica, los propietarios habrían limpiado la pared antes de irse, de acuerdo al diario South China Morning Post.

La Policía tomó una muestra de las manchas de la pared y envió a analizar el ADN. Los resultados fueron cruzados con la base de datos de las autoridades y coincidieron exactamente con el ADN de un conocido delincuente que luego fue detenido. Tras ser interrogado, confesó este crimen y otros cuatro robos. En los anteriores, sin embargo, se había salido con la suya sin que ningún insecto indirectamente lo delatara.

El delincuente detenido.

 

El ADN para resolver casos

Pese a su peculiaridad, el caso de los dos mosquitos no es tan extraño en China, donde las muestras de ADN son muy utilizadas a la hora de resolver delitos. Tanto es así que los casos resueltos por este método representan el 10% del total.

Algo tan sencillo como una mazorca mordida puede ser una prueba esencial para resolver un delito.

El mes pasado, sin ir más lejos, una mujer fue arrestada en la ciudad de Zhejiang por tirar un choclo desde un edificio alto y golpear en la cabeza a un bebé de 8 meses. La criatura perdió la vida a causa de ese incidente, por lo que las autoridades utilizaron las muestras de saliva de la mazorca para identificar a la responsable.