Lula da Silva desvinculó a las Fuerzas Armadas del ataque en Brasilia

Lula da Silva desvinculó esta semana a las fuerzas armadas de tener responsabilidad en la invasión al Congreso y a varios otros edificios administrativos, accionar llevado a cabo por militantes bolsonaristas, a principios de enero. El mandatario se juntó con los comandantes del ejército, la marina y la fuerza aérea en una reunión muy discutida por los medios locales.

Según el propio ministro de Defensa, José Múcio, parecería que el presidente de la nación vecina no los responsabilizó por los hechos, pero aún así indicó que había militares individuales que debían ser castigados por su accionar, algo con lo que los líderes de las fuerzas armadas coincidieron. En estas semanas, el gobierno de Lula da Silva realizó una depuración en la policía y otros grupos de seguridad cercanos al atentado.

Desde el suceso, el mandatario de Brasil empezó con este proceso que separó de sus cargos al menos a 46 militares que formaban parte de la administración del Palacio de la Alvorada y 38 militares que formaban parte del Gabinete de Seguridad Institucional de la Presidencia. A pesar de esto, algunas personas indican que esta limpieza no es suficiente y que Lula da Silva tiene que distanciar aún más a los militares de cualquier peso político.

“Uno de los requisitos de una democracia saludable es que los militares no tengan papel alguno en la política ni realicen más funciones que las especificadas”, afirmó Adriana Marques, investigadores del Instituto de Relaciones Internacionales y Defensa de la Universidad Federal de Río de Janeiro a la BBC. De acuerdo con ella: “Este proceso de radicalización de los militares, que se han involucrado en la política en los últimos años, no comienza con el expresidente Bolsonaro”, por lo que llama no solo a una purga sino también a aumentar la transparencia en las Fuerzas Armadas y mejorar el proceso de rendición de cuentas.

La visita de Lula a Argentina

Este domingo llegará el mandatario brasilero a tierra argentina, donde formará parte de la cumbre de la CELAC. Esta será la primera visita oficial que realiza Lula a nuestro país durante esta nueva presidencia, la cual ya desde sus comienzos ha quedado marcada por los eventos del 8 de enero.

Recién el lunes por la mañana arrancará su agenda en una reunión con Alberto Fernández en la Casa Rosada, seguido de una firma con varios ministros de un acuerdo de cooperación en Soberanía Energética e Integración Financiera, Defensa, Salud, Ciencia, Tecnología e Innovación, y Cooperación Antártica. No se sabe si se hablará en esta visita de la posibilidad de una “moneda Mercosur” similar al euro, algo que se rumoreó en estas semanas.