Un cartel mexicano entregó a los miembros que secuestraron a ciudadanos estadounidenses

Las autoridades en Mexico encontraron a cinco hombres, dados vuelta y atados de manos, con una carta escrita por un reconocido cártel. En la misiva pedían disculpas por el secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses que acabó con la muerte de dos de ellos. Los presuntos culpables fueron hallados vivos en la ciudad de Matamoros, que bordea al Río Grande, donde ocurrió el hecho.

Los reportes de los medios indican que las personas que realizaron este rapto en el norte de México son parte de una célula del Cártel del Golfo, llamada “El Grupo Escorpión”. Presuntamente, son quienes entregaron a los miembros que retuvieron y mataron a los norteamericanos. No obstante, los especialistas piden tranquilidad, ya que en otras ocasiones grupos criminales intentan culpabilizar de sus actos a bandas rivales mediante el uso de civiles inocentes, a los que los hacen pasar como integrantes de la organización delictiva.

“Decidimos entregar a las personas involucradas y directamente responsables por los eventos, los cuales durante todo el tiempo actuaron por su propia mano, mostrando falta de disciplina”, afirmaba la nota que tenían los hombres que encontraron la Policía de la nación norteña, en la que señalaban que rompieron reglas internas de la organización sobre la “protección de personas inocentes”. Este caso generó mucho revuelo, en especial en Estados Unidos, donde hubo discusiones en el Senado para utilizar las fuerzas armadas para combatir a los cárteles en México.

Las personas secuestradas eran un grupo de amigos que acompañaron a uno de ellos a realizar “turismo médico”, debido a que tenía que realizarse un tratamiento cosmético en una clínica de Matamoros. Sin embargo, la agencia de noticias Reuters confirmó que tres de ellas tenían cargos menores por consumo de drogas y una por la manufacturación de químicos prohibidos.

López Obrador contra los Estados Unidos

Esta situación comenzó fuertes discusiones del otro lado del Río Grande. Pues, varios grupos republicanos le pidieron al gobierno una intervención directa e, incluso, tildaron a estas organizaciones criminales como “organismos terroristas extranjeros” para poder “soltar toda la furia de los Estados Unidos contra ellos”, como expresó Lindsey Graham, representante de Carolina del Sur.

Esto levantó la furia de AMLO, que señaló al Congreso estadounidense que su país "no es un protectorado ni una colonia de los Estados Unidos”, similar a los dichos de Marcelo Ebrard, ministro de Asuntos Exteriores, quien declaró que es “inaceptable”.