Masivas manifestaciones en Francia por la reforma en las pensiones de Macron

Un paro general masivo y varias manifestaciones se viven en París y varios otros puntos neurálgicos de Francia luego de que la primera ministra de la nación europea, Élisabeth Borne, invocara el artículo 49/3 de la constitución para que el gobierno de Macron pudiera pasar la ley de cambio en las pensiones, sin la necesidad de que fuera votada en el parlamento.

Fuente: (JP+)

Esta ley, la cual ha sido discutida durante varios meses y ya había generado protestas y paros masivos en el pueblo franco, iba a votarse minutos antes de que se invocara ese artículo de la constitución, debido a que no estaba garantizado que pasara por la mayoría. Al menos 300 personas fueron arrestadas en toda Francia por esta legislación altamente impopular que vería aumentar de los 62 a los 64 años la edad para jubilarse.

Varios sindicatos, específicamente los relacionados con la Energía y la Recolección de Basura, empezaron paros masivos que durarán hasta el lunes, además de que diversos grupos se presentaron en la capital de Francia para realizar manifestaciones masivas e incluso cortaron la mayoría de los accesos a París, algo que generó un tráfico complicado en la ciudad de la luces, que nuevamente es centro de protestas contra el gobierno.

Fuente: (Euronews)

El ministro del Interior del país perteneciente a la Unión Europea fue muy duro contra los manifestantes y sus demostraciones. “La oposición es legítima, las protestas son legítimas, pero romper las cosas no lo es”, afirmó el político, quien señaló que son “protestas muy difíciles” y criticó la quema de figuras de Macron, Borne y varios ministros del gabinete.

Jubilados, pensiones y manifestantes

Esta no es la primera vez que el mandatario francés intenta modificar el código de las pensiones, ya que esta fue una de las promesas en las que se basó su campaña de reelección. En 2019 ya lo había intentado, pero con resultados similares a los actuales, a pesar de que el plan era diferente. 

Francia tiene la edad de retiro más joven de todo el antiguo continente y casi todos los presidentes, en las últimas cuatro décadas, intentaron cambiar las leyes de jubilación, lo que suele molestar a los trabajadores locales, quienes ven este modelo como la base laboral de la nación.