Brasil
Tras tres meses de autoexilio, Jair Bolsonaro regresó a Brasil
El exmandatario dio a entender que no se pondrá al frente de la oposición, pero continuará con su carrera política.Tras tres meses de exilio autoimpuesto al perder las elecciones, Jair Bolsonaro, el expresidente de Brasil, regresó a su país donde se enfrenta a varias situaciones políticas complicadas, como un juicio por incentivar la invasión de sus seguidores a varios edificios gubernamentales. Con su llegada, indicó a los medios que no liderará a la oposición, pero de una forma que dio a entender que su carrera política no se cerró.
El político abandonó las tierras de la nación vecina antes de Año Nuevo y de que asuma la presidencia el actual mandatario Lula da Silva. El 8 de enero, varios de sus seguidores irrumpieron diversos edificios gubernamentales en la plaza de los tres poderes y una investigación dio a entender que el expresidente de Brasil incitó a esta situación en sus redes sociales, además de que se supo que había un borrador escrito para no reconocer las elecciones.
Muchas personas esperaban que con su regreso se pusiera como la principal figura al frente de la oposición local, principalmente por su peso político e importancia en los ambientes de derecha. A pesar de esto, en diálogo con la CNN Brasil, el expresidente del país sureño indicó que “no tienes que oponerte a este gobierno. Este gobierno es una oposición en sí mismo”.
No obstante, destacó que no estará al frente de su partido, el Liberal, pero sí “como una persona experimentada”, él iba a colaborar con “lo que quieran”. Además, señaló que realizará una gira por todo el país durante los próximos meses de cara a las elecciones municipales del 2024.
Caso judicial
Pero el futuro judicial del político es complicado, en gran parte porque no solo tiene una causa abierta por la insurrección de sus seguidores el 8 de enero, sino que también hay varios otros casos que lo complicarían sobremanera.
Entre los posibles temas que podrían dejar preso a Bolsonaro, está una por interferir en la policía para proteger a personas sospechadas de corrupción, desinformar sobre el sistema de urnas electrónicas, filtrar información confidencial de una investigación policial y sus declaraciones en pandemia, cuando comparó la vacuna con un presunto riesgo de contraer VIH.