Elon Musk se disculpó con un exempleado al cual insultó por Twitter

Elon Musk se vio forzado a disculparse con un exempleado de Twitter llamado Halli Thorleifsson luego de una pelea que tuvo donde lo insultó al definirlo como “el peor” luego de que el hombre le preguntara si lo habían despedido o no debido a que el departamento de Recursos Humanos no lo tenía claro. Horas después de este intercambio el magnate sudafricano le pidió perdón y afirmó a sus seguidores que Thorleifsson analiza volver a la compañía.

Todo esto ocurrió luego de que le llegara un email a Halli donde le indicaban que ya no trabajaba más en la red social, pero al llamar a RRHH se dio cuenta que ellos no podían indicarle si seguía o no en Twitter. Allí fue cuando le envió un tweet a Elon Musk el cual le preguntó “Qué trabajo estaba haciendo”, y al recibir la respuesta de que su labor actual estaba en varios proyectos líderes, el magnate sudafricano indicó que era mentira y que “aseguró que su discapacidad le prevenía escribir pero sí puede realizar varios tweets”.

Esta fue la situación que arrancó los problemas ya que la información sobre la distrofia muscular de Halli era confidencial e incluso el propio trabajador indicó que anteriormente su condición no dificultaba el trabajo porque “era un director senior y mi labor principalmente era ayudar a los equipos a mejorar su trabajo, dándoles estrategia y asistencia técnica”. Horas después del intercambio Elon Musk le pidió disculpas e indicó que sus comentarios estaban basados en “cosas que se me informaron que no eran ciertas o, en algunos casos, sí eran ciertas, pero no significativas”.

Thorleifsson es islandés y empezó a trabajar para Twitter en 2021, un año antes de la compra a manos del dueño de Tesla. En vez de pagarle en cuotas realizaron un convenio de que lo contratarían, pero en caso de ser despedido la empresa debía abonar el dinero restante, razón por la cual el nórdico estaba en una lista de personas que no se debían echar.

La paranoia de Elon Musk

Desde que el empresario se adueñó de la famosa compañía, su personalidad parece haber cambiado y de acuerdo con el diario inglés de la BBC el sudafricano sufre actualmente cierta paranoia y contrató dos guardaespaldas que lo siguen por las oficinas de Twitter, incluso cuando va hacia el baño.

Esta información fue compartida por un ingeniero anónimo de la compañía quien describió a los dos sujetos que lo acompañan como “altos y voluminosos”, salidos de una “película de Hollywood”.