“Prepárense para una frustración”: así fue la dura reunión de Guzmán con los acreedores privados
No respondió preguntas y les anticipó que habrá una fuerte quita.
Sin eufemismos ni términos cordiales, el ministro de Economía Martín Guzmán le transmitió a los principales tenedores de bonos que el país efectuará una fuerte quita sobre la deuda, en especial sobre los intereses, que en algunos casos superan al 7%.
“Prepárense para una frustración”, le dijo el funcionario argentino a los bancos Morgan Stanley, Bank of American, Citibank, Santander, BBVA, Itaú y JP Morgan; y a los fondos de inversión Pimco, Blackrock, Templeton, Marathon y Fidelity.
"La reunión estratégica" (así la definieron desde el Gobierno) se llevó a cabo en Nueva York y aunque Guzmán no les adelantó porcentajes de quita ni condiciones de negociación, le anticipó a los acreedores privados que el país realizará, entre otras cosas, una fuerte quita en las tasas de interés.
En ese sentido, el funcionario aprovechó también la oportunidad para enrostrarle a los bonistas la responsabilidad que les cabe por haberle prestado al gobierno de Mauricio Macri bajo un cronograma de pagos imposible de afrontar.
Guzmán presentó ante los acreedores privados los mismos números que le había mostrado al FMI en todas las reuniones previas y les anticipó que la presentación oficial sobre la reestructuración de la deuda se realizará en Buenos Aires la semana próxima.
Si bien el ministro no respondió preguntas, les anticipó que habrá una nueva reunión en Wall Street -probablemente en la semana del 9 de marzo-, después del anunció oficial de la propuesta del Gobierno nacional.
Además de la quita, el ministro de economía anticipó también que el plan del Gobierno es comenzar a pagar a partir de 2023 y les aseguró que el país comenzará a crecer de manera sustentable a partir de 2021.
