Insólito: pese a la pandemia por el coronavirus, un boliche abrió sus puertas con más de 1200 asistentes
Fue en el cornubano bonaerense.
La conciencia social parece no ser algo que esté en las cabezas de los dueños de Pinar de Rocha ni en las de las cientos de personas que asistieron a la fiesta que el boliche organizó en la noche del domingo, pese a la total prohibición de actividades multitudinarias por la expansión del COVID-19.
El famoso local bailable del conurbano, ubicado en la localidad de Villa Sarmiento, partido de Morón, abrió sus puertas este domingo pese a la restricción que rige en la Provincia de Buenos Aires y, desde anoche, en todo el país.
El cincuentenario boliche había adelantado a los vecinos de la zona que abriría sus seis pistas con capacidad para 200 personas cada una, un total de 1200 personas en todo el complejo.
Sin embargo, a través de Instagram los asistentes subieron decenas de imágenes en las que se puede apreciar como la capacidad de Pinar de Rocha se sobrepasó sin respetar las medidas contra el coronavirus.
“Hay que entender que no son vacaciones”, remarcó el presidente Alberto Fernández durante la conferencia de prensa que dio ayer en la Quinta de Olivos por la pandemia del COVID-19.
El viernes por la noche la Ciudad de Buenos Aires clausuró el bar Carnal, ubicado en Palermo, y el local bailable Ivanoff, en el barrio de Flores.
El boliche porteño Volt, ubicado en Avenida Córdoba al 4100, funcionó durante la noche del sábado y fue clausurado junto a otros nueve bares que incumplieron la cuarentena.
