Bono de $10.000: la terrible verdad detrás del IFE
Un informe reveló la vulnerabilidad menos esperada.Un informe presentado por la Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género revela que los jóvenes de entre 18 y 25 años representan cerca del 20% de los beneficiarios del bono de $10.000 que ha creado Anses ante la pandemia del coronavirus.
El documento titulado “Ingreso Familiar de Emergencia: Análisis y desafíos para la transferencia de ingresos a trabajadores/as precarios/as”, afirma que los ciudadanos que se encuentran en ese espectro etario tienen un gran nivel de vulnerabilidad.
“Los/as jóvenes de 18 a 25 son, dentro de este universo, mayoría entre los asalariados informales y los desocupados, además de que tienen las tasas más altas de pobreza junto al grupo etario de 46 a 65 años”, indica el informe.
En ese sentido, el texto presentado por la Dirección que tiene a su cargo de Mercedes D’Alessandro, explica que “los más jóvenes son casi en su totalidad informales (98,8%), mientras que en el total de los segmentos considerados la informalidad es de 92,1%”.
Respecto a los índices de desocupación, el estudio señala que “La mayor concentración se da entre los más jóvenes: el 38,8% tiene entre 18 a 25 años (y 48,0% de esta franja etaria se encuentra debajo de la línea de pobreza, constituyendo el 53,9% de los pobres totales y 59,2% de los/as individuos en indigencia.) y 25,4% entre 26 a 35 años”.
Estos valores que presenta el informe evidencian la situación de vulnerabilidad en que se encuentran los más jóvenes, dado que “2 de cada 3 desempleados/as es menor de 35 años y 68,2% del total de este grupo son pobres”.
A su vez, el documento señala que “todos los indicadores sociolaborales presentados a lo largo de esta investigación dan cuenta de que la población a la cual apunta el IFE se trata, en todos los casos, de una población con ingresos muy bajos e inestables”.