"Destruir opositores": afilada revancha de Cristina Kirchner contra Mauricio Macri
La líder del Kirchnerismo se metió en la polémica acusación por espionaje ilegal.
Tras la denuncia de la actual gestión de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) por presunto espionaje durante el gobierno de Cambiemos, la vicepresidenta Cristina Kirchner se metió en la polémica para tomar revancha contra la presidencia de Mauricio Macri y aseguró que la principalidad finalidad de las operaciones que realizaban era para “destruir opositores”.
La queja penal que realizó Cristina Caamaño por la existencia de una supuesta red de inteligencia clandestina durante los últimos cuatro años fue motivo para que la líder del Kirchnerismo saliera a defenderse e intentar limpiar su imagen pública insistiendo en la idea de haber sido una víctima de la persecución política y judicial que habría llevado a cabo planificadamente el gobierno que la sucedió en la Rosada en 2015.
"Estaban proyectando lo que ellos mismos eran y hacían una verdadera asociación ilícita -afirmó CFK y agregó- hace dos días, confirmé lo que siempre supe y lo que en definitiva siempre denuncié”.
El descargo de la titular del Senado fue expuesto este jueves a través de un video que compartió en las redes sociales, donde ratificó que la administración antecesora al Frente de Todos “tenía como objeto destruir opositores". En el mismo se la escucha relatar su paso por los tribunales federales de Lomas de Zamora el pasado lunes en el marco de la megacausa de espionaje contra Macri.
"Mientras escuchaba no podía dejar de pensar en Máximo y en Florencia -expresó la líder K en alusión a sus hijos- que están acusados de formar parte de una asociación ilícita conmigo como jefa. Qué increíble, ¿no? Pensar que armaron cuatro causas judiciales en Comodoro Py".
En ese sentido, la exjefa de Estado contó que en el juzgado le explicaron la articulación que hubo entre narcotraficantes, la AFI, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, el Servicio Penitenciario Federal y la PSA, más periodistas macrista para llevar a cabo las tareas de vigilancia secreta.
Por su parte, la Agencia de Inteligencia ya presentó 500 “perfilamientos” para comprobar la existencia de una red de espionaje clandestina durante la gestión de Gustavo Arribas en la sede los espías y la presidencia de Mauricio Macri. Más tarde, Alberto Fernández anunció la intervención del Servicio Penitenciario tras encontrar en un allanamiento en el penal de Ezeiza pruebas que podrían verificar el montaje de un “alambrado” para realizar escuchas a exfuncionarios y empresarios vinculados con el Kirchnerismo.
Como si fuera poco, en las últimas horas, la ministra Gómez Alcorta y la legisladora Myriam Bregman confirmaron que, al igual que CFK, se presentarán como querellantes en la causa al repudiar el comportamiento de la AFI en la era M.
