Alberto Fernández repudió las torturas de la Policía a la familia Qom en Chaco
Los efectivos fueron desafectados.
Tras enterarse de los golpes y torturas que recibieron algunos miembros de una familia de la comunidad Qom en Chaco por parte de la Policía, el presidente Alberto Fernández reaccionó en las redes sociales y repudió la violencia contra los que fueron atacados con exceso de autoridad.
Fiel a su estilo el jefe de Estado saltó en defensa de los derechos de las personas sin importar su origen y, con una postura más humanitaria, el líder del Frente de Todos consideró que existe una deuda de la democracia hacia las minorías y diversidades, algo que para él quedó en evidencia ante este ataque policial a parte de un sector vulnerable.
"Las imágenes de violencia institucional que hemos visto en las últimas horas en el Chaco -el titular del Ejecutivo opinó que- son inaceptables”.
El hecho se supo gracias a la denuncia de los damnificados, quienes señalaron -que durante un operativo- uniformados de la fuerza de seguridad irrumpieron en su domicilio de la peor manera, a tal punto, que hasta recibieron amenazas de incendio sobre la propiedad con sus habitantes dentro de la misma.
Al trascender el ataque, el Ministerio de Seguridad de la provincia de Jorge Capitanich terminó apartando de sus funciones a los policías señalados como partícipes y responsables de semejante agresión ilegal contra el grupo étnico, esta actitud fue celebrada por el Primer mandatario en Twitter.
"Celebro que el Ejecutivo provincial haya apartado a los efectivos -dijo el Presidente de la Nación y enfatizó- pero debemos trabajar más profundamente en una problemática que es una deuda de la democracia".
El atentado contra los Qom que repudió el compañero de Cristina Kirchner fue de público conocimiento gracias a la viralización de videos, fotos y audios que sirvieron de prueba de lo que pasó en el barrio Cacique Pelayo-Banderas Argentina, de la localidad chaqueña de Fontana y con los que se pudo identificar a los efectivos policiales de la comisaría tercera que lo llevaron a cabo.
Las imágenes de la arremetida contra esta familia que reside en tierras chaqueñas hablan por sí mismas y comprueban el duro relato de los damnificados acerca de lo ocurrido el domingo por la madrugada. Tras ingresar por la fuerza a la casa de las víctimas, los policías encerraron en una comisaría a cuatro jóvenes, entre los que había dos mujeres, una de ellas menor de edad (16 años), quienes al recuperar la libertad a las pocas horas contaron las torturas a los que fueron expuestos.
